Un total de 451 alumnos de 29 colegios de la ciudad se unieron al programa Ninguén atrás, una iniciativa creada por el Concello para atender a los estudiantes que no disponen de recursos digitales o material escolar para finalizar sus estudios desde casa. De esta manera, voluntarios del área de Benestar Social imprimieron las tareas de los alumnos sin internet o sin ordenador para llevárselas a sus domicilios y poder seguir el ritmo de las clases durante el confinamiento. El equipo atiende las peticiones de las familias, pero también las preocupaciones de los profesores.