El tren hotel que conectaba A Coruña con Barcelona y Madrid no volverá a circular. La ciudad perderá su conexión ferroviaria en horario nocturno con ambas capitales por decisión de Renfe, que descarta retomar el servicio cuando se reanude el tráfico tras el estado de alarma, al menos en corto plazo. La suspensión afecta al total de vehículos de este tipo de los que dispone la operadora, en los que los usuarios podían viajar durante la noche y dormir en camas hasta alcanzar su destino. La compañía sustenta su eliminación en criterios económicos, dado el frenazo en las cuentas que ha supuesto la paralización del sector del transporte durante la emergencia sanitaria, en la que se restringió la movilidad para reducir contagios.

Con esta medida, la empresa busca paliar las pérdidas que prevé por el confinamiento, y por la "lenta" recuperación de la demanda de viajes que augura para los próximos meses. El 'tren hotel' podría ser un escollo en esa reactivación, pues provocaba una pérdida anual de unos 25 millones de euros. La compañía había ido reduciendo el servicio progresivamente, de modo que antes de la epidemia solo se prestaban dos conexiones en España y una internacional. Además de las de A Coruña, Barcelona se encontraba enlazada con Vigo, y Madrid, con Ferrol y Pontevedra.

Otra de las razones que esgrime Renfe para suprimir los vehículos es la complejidad que supondría mantener en ellos todas las medidas higiénicas y de seguridad exigidas. Este tipo de trenes está provisto de elementos como camas, compartimentos individuales y cafetería, por lo que prestar el servicio sería complicado. En su lugar, la empresa pretende fomentar -cuando recupere el ritmo cotidiano- las frecuencias diurnas, que en A Coruña se mantienen con Barcelona y Madrid a través del Alvia. En la capital catalana, por ejemplo, la ciudad contaba además antes de su eliminación con dos frecuencias diarias, una en cada sentido, que la conectaban con A Coruña.

Con el regreso a la normalidad, Renfe pretende priorizar la reanudación de aquellos trenes que presenten mayor rentabilidad por registrar un alto ratio de ocupación. La compañía cerró el primer trimestre del año con un descenso del 17,7% en los ingresos generados por el tráfico de usuarios en sus trenes AVE y Larga Distancia -que se situaron en 274,44 millones de euros, frente a los 333,3 millones de un año antes-, y con una caída del 16,9% y del 18,7% respectivamente en el número de viajeros.