Amaneció con sol y calor, pero la niebla ocupó las playas de Riazor y Orzán sobre las dos de la tarde. A Coruña disfrutó durante toda la semana de las altas temperaturas y de los primeros bañistas que, ya en la fase 2, pudieron acceder a los arenales de la ciudad. Ayer no fue diferente y las toallas cubrieron la arena de Riazor y Orzán, ya que en Matadero se estaban llevando a cabo labores de desinfección. Muchos bañistas tuvieron que recoger sus cosas y abrigarse cuando una niebla densa entró por el mar. Tras ella se ocultaron las playas y la Torre de Hércules, que no se podía ver desde el paseo.