San Pedro de Visma ha dejado de figurar entre las zonas de alto riesgo de incendio forestal, una categoría en la que la Xunta incluye a las áreas especialmente vulnerables al fuego para protegerlas de sus efectos con medidas más intensas de vigilancia, disuasión e investigación que en el resto del territorio. En el último Plan de prevención e defensa contra os incendios forestais de Galicia (Pladiga), publicado el pasado mes de mayo, el Gobierno autonómico ha retirado al enclave la categoría de Parroquia de Alta Actividad Incendiaria, en la que San Pedro de Visma se incluyó por la virulencia de los incendios sufridos.

Según indican desde la Consellería do Medio Rural, la exclusión del área se debe a que en los dos últimos años "la superficie total media por incendios fue igual o inferior a 3 hectáreas". El indicador que registra el Pladiga es del 0,0, es decir, ninguna hectárea arrasada por el fuego -según el documento, que recoge datos hasta el fin de 2019-, una situación muy distinta a la que presentaba el mismo punto en el pasado.

En el periodo de 2008 a 2017, el Plan Municipal de Prevención y Defensa contra los Incendios Forestales señalaba que San Pedro de Visma tenía una alta actividad incendiaria, de la que daban cuenta en la zona 77 fuegos con 74,57 hectáreas de superficie quemada de sus 1.407,14 hectáreas totales. En años especialmente adversos, como el 2010, llegaron a registrarse hasta quince incendios, de los 21 que se produjeron entonces en el conjunto de la urbe.

En abril de 2019, San Pedro de Visma fue la única parroquia de la ciudad que se incluyó en el convenio firmado por la Xunta y la Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp) para impulsar la tala de árboles en las franjas de seguridad y evitar así los fuegos. Hace escasos días, el 26 de mayo, se declaró uno en las inmediaciones de la depuradora de Bens, que arrasó al menos quince hectáreas de monte bajo.

Según indica el documento del Gobierno autonómico, junto a San Pedro de Visma dejan de ser zona de alto riesgo otras 45 parroquias gallegas, y se incorporan al listado tres. La Xunta apunta en el texto que prevé la reincorporación a la categoría, "incluso en un solo año", de las zonas descartadas en el caso de que aumente su actividad incendiaria, ya sea en cuanto al número de fuegos registrados (siete o más por año) o de superficie quemada (9 o más hectáreas).