La emergencia sanitaria del coronavirus tocó y hundió la principal línea de flotación del turismo, la movilidad, y el sector ha acusado el golpe. Las ciudades han tenido que repensar sus campañas de promoción, y enfocarse en nuevos públicos a escasos meses del inicio de la temporada estival, entre ellas A Coruña, que se muestra dispuesta a defender firmemente el turismo urbano. El Consorcio de Turismo y Congresos de la urbe maneja de cara a la 'nueva normalidad' una estrategia enfocada en el visitante del entorno, al que pretende atraer con el reclamo de la seguridad sanitaria y el impulso al patrimonio material e inmaterial. El organismo no pierde de vista 2021 mientras ultima la campaña de este año, en el que, según indica, "parece que el turismo va a ser slow, de experiencias menos multitudinarias e inversión en la transformación digital".

La institución tiene sobre la mesa dos campañas "a corto plazo de turismo doméstico", una "inminente" para el verano y otra de " city break" -escapada de fin de semana- a partir de septiembre. "Debemos alimentarnos de nuestro entorno. Desde A Coruña queremos apostar por un océano de sensaciones, paquetizando experiencias", explicó ayer la gerente del Consorcio, Lanzada Calatayud, durante el debate en línea sobre Reactivación de destinos urbanos tras el Covid-19 que organizó la entidad. En la mesa, en la que participaron responsables de Turismo de Santiago de Compostela, Gijón, San Sebastián y Barcelona, la encargada confió en "la potencialidad" de la urbe para recuperar visitas. Según apuntó, el plan del Consorcio se cimentará en vincular "todo su patrimonio tanto material como inmaterial", entre el que destacó la estancia coruñesa de Picasso, el "primer museo de la cerveza de España" MEGA y la expedición de Isabel Zendal.

La Torre de Hércules seguirá siendo base en el turismo post-Covid, aunque Calatayud no baraja aún fecha para la reapertura. "Estamos adaptando las medidas comunicadas desde el Instituto para la Calidad Turística Española (ICTE) y las propias medidas de Patrimonio. Abrir más tarde no nos preocupa, pero queremos hacerlo con todas las garantías", informó. La previsión es reducir a un tercio el aforo del faro, pasando de 32 personas a 10 por visita. También se establecerán "protocolos de entrada y salida", y se llevará a cabo un proceso "constante" de desinfección "después de cada grupo".

El objetivo principal es reducir colas, uno de los puntos que las participantes señalaron como desalentadores para el turismo urbano. Para evitarlas algunas ciudades, como Barcelona, planean lanzar una aplicación para móviles, con la que el usuario podrá saber si hay esperas para acceder a un monumento, comprar la entrada para visitarlo o ver otros lugares cercanos que puede conocer. Los enclaves concurrentes en la mesa coincidieron en poner en pausa durante este periodo al turista internacional, apostar por la creación de portales informativos y evitar que la proximidad del visitante se traduzca en un incremento del número de coches de la urbe mediante la inversión en transporte público. Zonas como Gijón han aliviado el perjuicio a los congresos con exenciones de cuotas a las empresas de su convention bureau, un organismo en el que el Consorcio, dice Calatayud, lleva "unos meses trabajando".

ESantiago de Compostela. La ciudad confía en el Xacobeo 2021 como un balón de oxígeno para el sector. Para los meses que restan hasta entonces, la urbe está desarrollando una campaña para público familiar, y un apartado en su web turística en la que listar todos los productos para ese target. El 29 de abril, se aprobó un plan de reactivación, que incluye una iniciativa para fomentar pernoctaciones con ofertas a quien duerma dos días seguidos en la ciudad. La directora de Turismo de Santiago, Flavia Ramil, indicó que se incidiría en la imagen de urbe "segura desde el punto de vista sanitario".

EGijón. Durante el confinamiento, la ciudad asturiana puso en marcha dos campañas - Gijón te espera y Cuando esto pase, Gijón te espera- dirigidas a reforzar el vínculo sentimental con la urbe e impulsar en ella las pequeñas escapadas. "Nos está sorprendiendo que las peticiones que se trasladan son para estancias más largas. Parece que la gente quiere moverse una vez y estar mucho tiempo", comentó la gerente de Divertia Gijón, Lara Martínez. La responsable de la empresa municipal, que tiene las competencias turísticas de la urbe, destacó también Tú en Gijón, una campaña dirigida a que el enclave "se convierta en el propio destino turístico de los gijonenses".

ESan Sebastián. El coronavirus obligó a San Sebastián a cambiar de foco en cuanto al perfil de su visitante. "Tenemos que aprender a trabajar con un cliente de proximidad. Nos planteábamos unas escapadas internacionales y eso ahora está cambiando", reflexionó la directora de San Sebastián Turismo, Isabel Aguirrezabala. En el grueso de la epidemia, la ciudad vasca empleó su web como punto de "información veraz" para sus socios empresariales, y actualmente se encuentra invirtiendo en la accesibilidad de los servicios públicos, la propia vía y el transporte urbano.

EBarcelona. La capital -que apuesta por ser un polo cultural- dispone de un plan de acción de junio a diciembre, que pivota sobre "transmitir un mensaje de confianza". En su intervención, la directora de Turisme Barcelona, Marian Muro, explicó que se ha creado una plataforma web, en la que el visitante podrá ver "todo lo que la ciudad tendrá activado" en cuanto a alojamientos, gastronomía o movilidad. La información se ha volcado además en una app, y se ha creado una bolsa de aparcamientos "de forma que los que vengan puedan estacionar y moverse por la ciudad por medios más sostenibles". La urbe catalana está negociando acuerdos de colaboración con oficinas de turismo internacionales, aunque no será hasta 2021 cuando se proponga captar de nuevo a ese público.