Desde una terraza de A Falperra, Fran García señala que lo importante ahora es "contribuir a la economía del barrio". "Los que más van a sufrir son los autonómos y el pequeño comercio, así que tenemos que ayudarles y comprar menos por internet, que es más impersonal", expone. Para García, el confinamiento "no fue demasiado complicado", sobre todo porque podía salir a pasear con su perro. "Todos los días bajaba con él", recuerda. Antes de la pandemia, solía pasar el rato en los bares de la zona con otros vecinos y clientes del barrio. "Por eso en cuanto abrieron las terrazas, no dudé en ir", explica. Sabe que es el momento de "arrimar el hombro" y ayudar "a los que más lo necesitan". "Creo que tenemos que hacer más vida social en nuestros barrios para que los negocios no tengan que cerrar", opina.