El permiso para que sea legal bañarse en las aguas del paseo de O Parrote, ante La Solana, depende de un informe de Puertos del Estado, y, en el caso de que este sea favorable, de un permiso de la Xunta que dependerá de un análisis del agua. De acuerdo con fuentes del Gobierno gallego, en el caso de que este informe sea positivo, "la zona se incluiría en el programa de vigilancia de baños de la dirección xeral de Saúde Pública". Las muestras que se tomen sobre las condiciones de la zona a partir de ese momento "se analizarían en el laboratorio de saúde pública de Galicia igual que todas las del programa".

El baño en la zona, que se venía realizando tradicionalmente por algunos vecinos y por usuarios de La Solana, no ha quedado prohibido debido a problemas en la calidad de las aguas, sino a que se encuentra en una zona portuaria, y en este tipo de lugares la natación quedó proscrita ya en los años treinta del siglo pasado. La normativa, sin embargo, no se aplicaba hasta que en abril del año pasado, cuando el Ayuntamiento coruñés y la Autoridad Portuaria decidieron restringirlo explícitamente cumpliendo la ley.

Actualmente, en la plataforma del paseo se encuentra un cartel de "Prohibido el baño en aguas portuarias" alertando contra la práctica, si bien, antes de que el estado de alarma pusiese en pausa la práctica, era frecuente ver a vecinos, principalmente usuarios de La Solana, dándose un chapuzón en las aguas.

En los meses siguientes al anuncio de la prohibición se presentaron más de 1.000 firmas par que se autorizase el baño en el lugar, y el pasado mes de octubre el Ayuntamiento anunció que pediría a la Autoridad Portuaria que se crease una zona para el baño, el origen del proceso actual.

Según afirmó en ese momento el concejal de Urbanismo, Juan Díaz Villoslada, esta zona de baño sería temporal y precisaría tanto de balizamiento como de socorristas, así como de análisis periódicos para comprobar la calidad del agua, que es la labor que le corresponde a la Xunta. Además, tendría que cuidarse de no afectar a las actividades e marisquero que se llevan a cabo en el banco de O Parrote.

Por otra parte, el pasado mes de mayo se excluyó al arenal de O Portiño, situado junto al puerto del mismo nombre y ante las islas de San Pedro del baño por motivos idénticos a los del paseo de O Parrote. Esto es, debido a que "dicha playa está incluida dentro de la zona de servicio del puerto de San Pedro de Visma- O Portiño", y por lo tanto "el baño es una de las actividades prohibidas en la legislación de puertos por motivos de seguridad y tráfico portuario".

De este modo, en su resolución acerca de las zonas de baño para este verano en Galicia, la Consellería de Sanidade alertó de que el arenal no podrá ser empleado para el baño este año. Debido a la exclusión, la Xunta eliminó el punto de toma de muestras del estado del agua que tenían en esta zona.

Al igual que en O Parrote, la normativa no es nueva, pero sí es una novedad que se haga cumplir. Hasta ahora, la Xunta incluía a O Portiño, de pequeño tamaño, arena fina y resguardada entre acantilados, entre las playas en las que se realizaban análisis, aprobando de facto la actividad de los bañistas

De hecho, en agosto del año pasado el Gobierno gallego colocó un cartel desaconsejando el baño debido a que los análisis habían alertado de concentraciones superiores a las recomendadas de una bacteria, Escherichia Coli, que podían poner en peligro la salud de los bañistas. En ese momento la Xunta realizaba controles en la playa aproximadamente cada quince días.