El Concello controlará el acceso a las playas de la ciudad con cámaras y un dispositivo para contar a los bañistas, con el ánimo de mantener los aforos de los arenales en niveles que no pongan en peligro la seguridad de los usuarios y permitan mantener distancias de seguridad, como ya avanzó LA OPINIÓN hace unos días.

En total, según ha informado el Ayuntamiento, habrá catorce puntos de control de acceso. De ellos, cuatro estarán situados en Riazor, y otros cuatro en el Orzán, mientras que la playa del Matadero contará con otros dos. También habrá uno en As Lapas, dos en San Amaro y , finalmente, se situará uno más en la playa de Oza.

A través de este sistema de sensores, el Ayuntamiento considera que se conocerá en tiempo real y con exactitud cuántas personas hay en los arenales de la ciudad.

La información se dará a conocer al público por dos medios. Estará disponible en paneles y también en la página web de Medio Ambiente, que se podrá consultar desde el móvil a través de un enlace o un código QR.

Fuentes municipales han señalado que los dispositivos todavía no se han instalado, debido a que hasta el momento la climatología ha dificultado la colocación de los arcos, pero estarán instalados y preparados para funcionar en cuanto regrese el buen tiempo.

Socorristas y policías

Desde el día de mañana, un total de 50 socorristas velarán por la seguridad de los bañistas en las playas de A Coruña. Además, durante todo el verano, un dispositivo de entre 70 y 80 agentes de la Policía Local vigilará a través de un sistema de cámaras que se cumplan todas las medidas sanitarias y de distanciamiento social.

Según informan fuentes municipales, el Concello se encuentra actualmente a la espera del visto bueno de la delegación del Gobierno para activar este sistema de control a través de cámaras.