Paneles situados en distintos puntos de la ciudad, la web controlpraias.coruna.gal y un código QR informan ya en tiempo real de la capacidad de las playas para que los bañistas conozcan su disponibilidad sin tener que desplazarse. Unos grandes arcos con unos sensores de paso situados a la entrada de cada arenal contabilizan las personas que entran y salen y un semáforo controla la capacidad y la señaliza en tiempo real en cada playa. En total se han instalado 11 puntos de control de accesos: 4 en la playa de Riazor, 4 en el Orzán, 2 en Matadero, 1 en Lapas, 2 en San Amaro y 1 en la playa de Oza. Durante parte del día de ayer, no había vallas colocadas en varias zonas por lo que muchos bañistas pasaron sin pasar por el arco.

Por otro lado, las cinco playas de la ciudad de A Coruña, Riazor, Orzán-Matadero, Lapas, San Amaro y Oza, lucen desde ayer sendas banderas azules, una distinción que otorga la Asociación de Educación Ambiental y del Consumidor y que confirma que "son excelentes y accesibles", subrayó la edil de Medio Ambiente, Esther Fontán.