En el descanso para comer, este grupo de estudiantes se sentaba como en una biblioteca antes del siguiente examen. "Repasamos fórmulas, nos da seguridad, pero estamos hablando también", confiesan estos alumnos del Colegio Internacional de Eirís, que aseguran que, durante el confinamiento, tuvieron que asistir a clase las mismas horas que cuando iban al centro, así que, no se notan desentrenados ni en hacer exámenes ni en estudiar.