El Concello intenta desbloquear el informe negativo que Patrimonio emitió sobre su propuesta de mejora de los accesos del Hospital Oncológico. Lo aseguró ayer la alcaldesa Inés Rey junto al edil de Urbanismo Juan Díaz Villoslada en su visita al centro, al que acudió para conocer el estado del edificio y estudiar "lo que es ya una demanda histórica". El proyecto municipal incluye la urbanización del entorno, la ampliación de la carretera y trabajos en el sistema de pluviales y la iluminación, con un coste de 400.000 euros, pero no cuenta con el visto bueno de la Consellería de Cultura. Se trata de "una situación que trataremos de resolver con el departamento autonómico", indicó la regidora, que afirmó que el inmueble "lleva tiempo demandando reformas".
La alcaldesa apuntó que la solución planteada por el Concello es "la más adecuada para la zona", y la mejor vía para poner fin a "los problemas de comunicación y de accesos" de los que adolece el edificio. Afirmó que la negativa de la Xunta " dificulta que podamos acometer la obra tal y como pensábamos", pero que el Concello tratará "de dialogar con la administración para poder dar una solución". El Gobierno autonómico rechazó el proyecto al considerar que la nueva acera tendría más longitud y pendiente, y "menor anchura en algunos tramos", lo que empeoraría el acceso para personas mayores o con movilidad reducida. Además, según indicó, no sería "respetuosa" con el entorno, que se encuentra próximo al Camino Inglés, por lo que dice esperar una "propuesta viable" que encaje "con las buenas prácticas para las acciones en los Caminos de Santiago". La Xunta asegura que ya trasladó al Ayuntamiento los criterios a tener en cuenta, y que ahora el Concello volverá a debatir con el organismo para dar salida a la remodelación.
