La sala Inn, en el centro comercial Los Cantones Village, cierra hasta nuevo aviso. El gerente del local, Luis Diz, explica que la decisión se ha tomado porque "hay público al que le cuesta adaptarse a las normas". Tras un mes desde su reapertura, la sala vuelve a cerrar por el incumplimiento del protocolo sanitario por parte de algunos clientes.

Diz reconoce que se trata de una "situación compleja", pero la falta de responsabilidad de algunas personas les ha llevado a cortar por lo sano. "Vimos que no éramos capaces de cambiarlo", apunta, a la vez que informa que la decisión de cerrar "se toma en base a la responsabilidad social" que tienen "como empresa".

Con este anuncio del cese temporal de la actividad, la sala Inn espera que la gente "se vaya concienciado de que esto no es una broma". "Hay rebrotes, aunque no por el ocio nocturno en A Coruña, pero si nos protegemos y usamos la mascarilla vamos a poder estar abiertos y divertirnos, aunque sea de una forma diferente a la que conocíamos antes", analiza Luis Diz, que entiende que "si no es de esa forma, es mejor estar cerrados".

Aunque recuerda que "no se puede generalizar", el gerente de la sala Inn señala a los jóvenes de "entre 28 y 30 años" como los que menos respetan las normas relacionadas con el coronavirus. "Son los que dan más problemas. El público que asimila mejor las normas es la gente más joven. Se adapta muy bien, aunque a determinadas horas de la noche hay que recordarles que tienen que tener la mascarilla puesta", detalla.

Diz considera que esta situación se da porque hay otros locales en la ciudad, que frecuentan los jóvenes de 30 años, que son "más permisivos". "Hay que tener la mascarilla puesta salvo en el momento puntual de consumir y vemos que en muchas terrazas y bares no es así. No se está exigiendo. Luego, si lo pedimos de noche, cuesta más asumirlo", analiza.

Al gerente de la Inn le preocupa que "no se sigan las medidas de seguridad", pues forman parte de una nueva normalidad a la que hay que adaptarse rápido. "Esperaremos a que pase un tiempo y que la gente tenga conciencia de cuál es el camino a seguir", indica sobre una posible reapertura, sin concretar fechas.

Diz es también el responsable de otros locales como el Playa Club, la Moon o la sala Pelícano, pero en estos no ha tenido que tomar la decisión de cerrar y dejar al margen los bailes y las copas. "Esto es porque el target que movemos en la Inn es gente de entre 28 y 30 años, que son los que están dando más problemas", concluye.