El presidente de la Asociación Provincial de Hostelería, Héctor Cañete, anunció esta mañana que la entidad presentará hoy mismo un recurso contra las restricciones impuestas por la Xunta a estos empresarios -clausura del ocio nocturno, aforo al 50% en bares y cafeterías y cierre de puertas a la una de la madrugada- al considerar que vulneran las libertades individuales y afectan a las licencias de apertura de los establecimientos.

Cañete señaló que el efecto de esas medidas sobre la hostelería coruñesa ha sido muy negativo, por lo que la asociación se decantó por seguir el modelo de la asociación aragonesa, cuyo recurso fue aceptado por el Tribunal Superior de Justicia de esa comunidad. La entidad coruñesa había previsto inicialmente esperar a que el miércoles la Xunta informase si mantendrá las restricciones, pero los resultados del fin de semana la animaron a plantear el recurso..

El presidente de los hosteleros coruñeses se decanta por la publicación de un decreto estatal que establezca las limitaciones por causa de fuerza mayor para este sector con el fin de que los empresarios puedan solicita ayudas y ERTE para sus plantillas, ya que con medidas para periodos tan cortos como el aplicado por la Xunta "no vale la pena pedirlos porque la tramitación es muy compleja".

"El sector lo está pasando muy mal porque un segundo cierre parcial no ha sentado bien", explicó Cañete, quien señaló que los hosteleros están "haciendo un sacrificio muy grande porque hay gente que incumple las medidas de protección". Sobre las restricciones ordenadas por la Xunta, afirmó que "todo el mundo está muy afectado porque se cierra pronto y el fin de semana se nota más", mientras que la reducción del aforo en las terrazas al 50% "ha sido un golpe muy duro,".

"Estamos cumpliendo las normas y porque hay gente que las incumple somos los perjudicados", opinó Héctor Cañete, para quien los hosteleros están "haciendo un esfuerzo al límite". Admitió que la salud pública "es lo más importante", por lo que propuso que quien incumpla la normativa de prevención "debe ser sancionado de una manera ejemplar, no puede ser que porque haya gente que no se quiera poner la mascarilla haya gente que se muera y otros nos quedemos sin negocio".

Cañete defendió además que se concedan ayudas a los locales del ocio nocturno por verse obligado a cerrar y a los hosteleros que deben reducir el aforo de sus establecimientos y contrastó que realizan importantes gastos en medidas de prevención y aun así se ven obligados a reducir su actividad.

"Hemos notado un descenso porque mucha gente que hace plan para salir de noche, cenar y tomarse una copa tranquila se ha retraído, porque cuando se esté tomando el café le van a levantar de la mesa", expuso sobre su experiencia de este fin de semana con restricciones Antón Sáez, portavoz de la asociación de hosteleros La Marina.

Los locales de esta parte de la ciudad sufrieron anulaciones de reservas a causa de las limitaciones de aforo y de horarios, ya que tenían que cerrar sus puertas a la una y además no podían dar servicio a grupos de más de diez personas. "Los locales de primera copa, que estaban facturando la mitad o menos hasta ahora, este fin de semana lo han hecho la tercera parte, por lo que ni vale la pena estar abierto", se lamentó Sáez sobre las consecuencias de las restricciones.

"El público en los locales de la Marina había bajado un poquito, pero se había incrementado el consumo de la primera copa en la terraza, pero si te van a levantar a las doce y media, son dos horas menos de actividad, por lo que todos los locales han notado una bajada de facturación tremenda", comentó.

Sáez señaló que la mayoría de los establecimientos han consultado con sus asesorías para estudiar la posibilidad de solicitar Ertes para los trabajadores, pero que hay mucha tensión "porque los primeros se cobraron bien pero ahora hay retrasos muy grandes", a lo que añadió que los empleados afectados por esta crisis son "miles en la ciudad, por lo que la situación es dramática".

Los empresarios asumen que haya que adoptar medidas preventivas a causa de la pandemia, pero Sáez destacó que "solo se han tomado en la hostelería, ya que si la gente sigue yendo a la playa o por la calle sin mascarilla no vale de nada cerrar la hostelería". Según su criterio, restricciones de este tipo "perjudicarán al sector durante varias semanas y el resultado va a ser exactamente el mismo, ya que va a seguir habiendo brotes".

También resaltó Sáez que los rebrotes de A Coruña no tuvieron su origen en la hostelería, por lo que consideró que "se está demonizando" esta actividad, de la que aseguró que "lo estaba haciendo muy bien en general, la gente estaba más controlada que en la playa". "Si nos cierran no se va a arreglar nada y vamos a dejar de facturar, porque ya perdimos el fin de semana de la semana grande de las fiestas", advirtió.