El Concello de A Coruña notifica la orden de limpieza de 141 fincas en las parroquias rurales del término municipal. En cumplimiento de la ley gallega para la prevención de incendios, publica en el Diario Oficial de Galicia el listado de propiedades con dueños de identidad desconocida o que no se han podido localizar. El total de la factura del desbroce y tala obligatorios es de 383.000 euros. Si los titulares no aparecen o incumplen la orden, el Ayuntamiento tiene que asumir los trabajos de manera subsidiaria. Después, la Administración tratará de cobrar el coste, con una dificultad evidente: ignora la titularidad del 75% de las fincas.
Las facturas van desde los 15 a los casi nueve mil euros, correspondientes a fincas de más de cinco hectáreas. Estas están en la parroquia de San Pedro de Visma, que concentra más de la mitad de las parcelas afectadas (72) y que es considerada zona "priorizada". El resto de propiedades, todas con dueño desconocido, se reparten entre San Vicente de Elviña y San Cristóbal das Viñas.
Los responsables de las fincas tienen quince días para ejecutar la orden desde su publicación, el pasado miércoles. Si transcurrido el plazo señalado no se gestionase la biomasa de las fincas, el Concello puede recurrir a la empresa pública autonómica Seaga para su desbroce. No hace falta ningún tipo de tramitación y los propietarios están obligados a facilitar el paso a la Administración para materializar la limpieza. La Administración podrá también talar las especies arbóreas prohibidas por la normativa gallega. Realizará una liquidación provisional de los trabajos de manera inicial, que podría elevarse una vez finalizados.
El cobro de la factura no es impedimento para que la Administración pueda iniciar un procedimiento sancionador. La empresa encargada de los trabajos de tala o desbroce puede acceder libremente a la finca sin permiso de sus dueños a no ser que esta incluya el domicilio de los mismos.
