La actualización de las normas sanitarias de la Xunta ha trastocado el plan que muchos centros habían perfilado durante las últimas semanas. Y es que la versión más reciente aumenta de uno a 1,5 metros la distancia que debe guardar el alumnado, lo que obliga a reestructurar los grupos por aula que se habían establecido. Institutos con gran cantidad de estudiantes, como el Eusebio da Guarda, baraja entre las posibles soluciones el traslado a horario de tarde de parte de su alumnos, para poder cumplir con la distancia de seguridad en el caso de que no sea posible habilitar más aulas para distribuir a los estudiantes. "Tenemos que buscar espacios para cubrir todos los grupos, vaciando clases grandes como las de tecnología o plástica. Si no caben físicamente, habrá que tomar otra decisión, y una podría ser buscar otros horarios", indica la directora del centro, Isabel Ruso.
La responsable apunta que se trata de una posibilidad que podría asumirse "en general", más allá de su propio instituto, aunque reconoce que las modificaciones han supuesto un "cambio radical" para edificios de una magnitud como la suya. "El problema es que el curso estaba montado, con medidas para un número de grupos y la matrícula cerrada. Esto rompe con todo y hay que volver a empezar".
Entre las opciones que se barajan, se incluye también la puesta en marcha de recreos diferenciados, de modo que se puedan reducir el número de alumnos que ocupen el patio en cada momento. Desde el colegio reconocen que el nuevo plan "supondrá un tiempo", pero que "el tema sanitario está por encima de cualquier preferencia" de centros o estudiantado.
Ruso asegura que "lo más importante es seguir el protocolo", que le genera "sentimientos encontrados" entre la tranquilidad de la mayor distancia y el enredo de los nuevos desdobles. El resto de medidas, como las señales en el suelo para facilitar el tránsito y la instalación de decálogos sobre el Covid en cada aula, ya se encuentran preparados para la vuelta a clases.
Marea, crítica con los cambios
Marea Atlántica denunció ayer en un comunicado la nueva versión de las instrucciones de la Xunta para el curso escolar. Su portavoz, María García, afirma que "Feijóo improvisa ahora cambios en el protocolo de vuelta a las aulas para cumplir sobre el papel el acuerdo con el Ministerio de Educación", pero que estos "llegan tarde para ser aplicados correctamente en el inicio del curso, y sin recursos, dejando todo el trabajo a profesorado, alumnado y familias".
El partido afea que no se habiliten espacios para desdoblar las aulas ante la nueva distancia de seguridad, y que no se contrate "a más personal docente" para vigilar las medidas. Insta por ello a Xunta y Concello a poner "recursos a disposición de los centros de enseñanza pública" para que el regreso sea "en condiciones seguras".
A ambas entidades les recrimina además falta de coordinación, y acusa al concejal de Educación, Jesús Celemín, de no haber tenido "una sola conversación con el gobierno gallego en todo el verano". Por ello, solicitará que se convoque la Comisión de Educación, con el fin de que el edil "de explicaciones e informe sobre sus planes para el inicio del curso", y para pedir que el Ayuntamiento ponga en marcha una contratación de urgencia para aumentar el personal de limpieza en las escuelas infantiles municipales.
