Un doble rasero. Uno para bares y aviones, y otro para la cultura, que pasa con el Covid un trago cuya amargura no termina de disolverse. Es lo que denunciaron ayer los integrantes de La verbena de la paloma, la zarzuela que se representará mañana y el sábado en la Temporada Lírica ante un Colón semivacío, debido a las restricciones de aforo decretadas por Sanidad en el área coruñesa. Tan solo 60 personas de 840 localidades podrán acudir de forma presencial para ver al elenco, que se reunió ayer frente al Palco de la Música para protestar por la medida.

Cantantes, músicos, miembros del coro, técnicos y directores hicieron acto de presencia por la tarde y expresaron su malestar a través de un manifiesto. "Estamos todos muy indignados. Se habían comprometido a dejar unas 300 localidades, y ayer [por el martes] confirmaron que no", critica uno de los integrantes, cuya identidad prefiere que no trascienda. Asegura que existen "dos varas de medida" en función de si las instrucciones son para terrazas o para sitios como el teatro, cuyos profesionales acusan el golpe. "No se piensa en la repercusión que esto tiene en los que viven de este trabajo, como los maquinistas o los coros. Es gente que vive al día y alguno no tiene ni para ir a la compra porque lleva meses sin trabajar" defiende.

También los que disponen de cierto colchón estaban ayer "enfadados". "Es totalmente injusto para la compañía, porque la restricción solo afecta a A Coruña, el resto de teatros tienen aforos del 50%" lamenta el barítono Borja Quiza, que alerta de que "parece que la cultura está estigmatizada". Indica que "se ha intentado que los políticos quitasen las restricciones", pero que "no ha habido manera". Por ello, Amigos de la Ópera ha abierto la devolución de las entradas, ya que el aplazamiento "no era viable" por la agenda de los artistas.

Un programa incierto

Además de a la zarzuela, la reducción de aforo afecta a Grandes voces para grandes óperas, el concierto que inaugurará hoy a las 20.00 h. la Temporada Lírica. Al escenario se subirán el barítono Carlos Álvarez, el tenor Alejandro Roy y el bajo Simón Orfila, acompañados por la aclamada soprano Sondra Radvanovsky. El elenco interpretará piezas de Verdi, Puccini y Beethoven, entre otras. El escaso público con el que contará podría extenderse a otras de las citas líricas si no se levantasen las restricciones.