Dos días juntos y ya parece que Xoel López y la Orquesta Sinfónica de Galicia (OSG) llevan tocando juntos media vida. "¿Qué tal lo ves?", le dice el cantante al director de la agrupación, Dima Slobodeniuouk, durante un ensayo. Sobre el escenario charlan, se ríen, bailan y, lo más importante, se entienden. El resultado de esa unión, este sábado en el Coliseum a las 20.00 horas. "Es un honor", reconocen ambos.

Suena la música y los pelos se ponen de punta, como si fuese algo automático. Como si hacer magia fuese tan fácil como cuando Xoel López se pone ante el micrófono y Slobodeniouk coge su batuta. El camino hasta aquí, además, no ha sido fácil. "Empecé muy prudente, pensando que el concierto podía cancelarse. En este contexto, las cosas se van cayendo", desvela el coruñés, que no se despega de su banda.

La complejidad, y también el disfrute, se encuentra en "juntar dos mundos" o, como dice el director de la OSG, "dos esferas de un mismo mundo". "Pero ya estamos conectados", apura a decir.

Todavía queda "trabajo por delante" para llegar a la cita de mañana con las ideas en su sitio. "Es una experiencia emocional", resume Dima Slobodeniuouk, que entiende esta actuación como una "oportunidad fantástica" ante un "público diferente".

Será también el estreno de la Sinfónica en un Coliseum que ahora es su casa. "Es un espacio acústico muy interesante", apunta. También para Xoel López es "ilusionante" tocar en un recinto al que acudió de joven, como un coruñés más, donde se empapó de música, igual que en las salas del centro de la ciudad. Una historia contada a través de sus canciones, que ahora sonarán de forma diferente, con 45 músicos aportando su toque especial. "Siempre estuve abierto a cualquier fusión, pero hacer algo con arreglos sinfónicos era casi una cuenta pendiente, una espinita clavada", revela el artista coruñés, para el que es "un lujo y un placer" tocar junto al Sinfónica. "La sensación es de que embellecen las canciones, las llevan a otra dimensión", describe.

Dos almas de oro -canción que no faltará en el repertorio- para llenar de emociones un Coliseum al que podrán acceder 800 personas por las restricciones impuestas por el Covid-19. Además, se han vendido entradas para seguir el streaming del concierto. "Metimos canciones que hacía mucho que no se tocaban y florecen otra vez. Es maravilloso", añade un Xoel López que ya tiene su tema favorito de esta cita: " Tigre de bengala. Con la Orquesta cobra una dimensión que no me esperaba y me encanta. Suena como música de los 60".

Para Slobodeniouk esta fusión es, además, una oportunidad para "salir de la zona de confort", algo que "siempre está bien para el desarrollo de la Sinfónica".

Tierra, Patagonia, Joana o Caracoles forman parte de este repertorio único que nace de la "mezcla de una marca de identidad, como la OSG, y de un talentoso músico, como Xoel", según las palabras de la alcaldesa, Inés Rey, que hizo ayer una visita al Coliseum, donde recordó que "la pandemia" ha recordado a todos "lo fundamental de lo próximo". Y nada tan cercano y tan coruñés como este concierto.