Los tiempos han cambiado a causa del coronavirus. También el turismo. Pese a las restricciones y la incertidumbre del viajero, el parque de pisos turísticos de la ciudad sigue aumentando. Ha pasado de las 348 viviendas vacacionales de septiembre del año pasado a las 432 actuales. Lo curioso es que hay edificios enteros y más de una veintena ofertan entre dos y 20 pisos a sus huéspedes.

Entre ellos se encuentra Noro Plaza. Cinco plantas con 12 apartamentos muy próximos a San Agustín. Todavía no se ha estrenado. "Tenemos previsto abrir a lo largo del mes de octubre", desvela Isabel Arias, de la empresa gestora del alojamiento. La restauración del edificio situado en el número 5 de la calle Plaza se inició meses atrás, cuando la pandemia todavía no era una realidad. "Llevamos trabajando muchos años en este proyecto y no nos imaginábamos estar en esta situación. Esperemos que todo pase", reflexiona.

La caída del turismo no ha frenado a Noro Plaza. "Creemos que podemos tener ventajas sobre un hospedaje normal. Ahora los viajeros prefieren los apartamentos", analiza. Pero estos no son unos pisos cualquiera. "Queremos competir con los grandes hoteles de la ciudad. Hasta ahora, la vivienda turística se entendía como una segunda residencia o una casa heredada a la que sacar rentabilidad. Este edificio va más allá. Queremos posicionarnos en un tipo de cliente que busque una calidad superior", concreta Isabel Arias.

Aunque la mayoría son pequeños propietarios con uno o dos pisos disponibles para alquiler vacacional, la ciudad ya cuenta con cadenas y marcas dedicadas a este tipo de negocio. Algunas de ellas, fácilmente reconocibles por su logo y su apariencia como Luxury Leisure, Franja 44, OK The Way o Torre de Hércules Suites by Lagunita.

Anastasia Orlowska es la fundadora de Turquoise Apartaments, empresa que gestiona diferentes apartamentos en A Coruña. Desde Riazor a Elviña pasando por impresionantes pisos con vistas a la Torre de Hércules. Hace nueve años que Orlowska llegó de Polonia y fue consciente de un problema que se empeñó en resolver. "Tuve una ONG junto con unos compañeros. Teníamos problemas para alojar a los becarios que venían de otros países para hacer prácticas aquí. Los propietarios no querían alquilar sus pisos por 3 o 5 meses a extranjeros", recuerda. Compró un apartamento y lo único que hizo fue crecer hasta que en agosto de 2018 nació Turquoise. "Ahora ya gestionamos propiedades de otras personas", señala.

A pesar de la experiencia, Anastasia Orlowska también ha tenido que adaptarse a la nueva situación provocada por el Covid-19. "La forma de trabajar este año ha cambiado mucho. Nuestro target son los turistas extranjeros. En enero teníamos casi todo reservado y al final solo hemos recibido tres visitas de Reino Unido y Francia", relata. Pero no se desanimó y se dirigió hacia el turista nacional. "Agosto fue muy bueno y ya notamos que la cosa se va animando. Incluso nos han entrado reservas de extranjeros para el año que viene", explica.

Turquoise Apartaments, además, ha dado con un nuevo mercado que le permite seguir creciendo. "Justo después del confinamiento reservaron algunas empresas que tienen que montar algo en equipo en la ciudad y prefieren no ir a un hotel para evitar zonas comunes. Tenemos apartamentos grandes y están cómodos. Así nos conocieron más empresas", cuenta Orlowska.

La dueña de esta empresa asegura que fueron "de los primeros" en la ciudad en unirse a "Airbnb", la plataforma en la que se puede reservar pisos turísticos para las vacaciones, aunque ahora ya cuentan con página web propia ( www.turquoiseapartments.com).

Ahí es donde se anuncian, igual que en Booking o HomeAway, los 432 pisos vacacionales que figuran en el directorio de empresas y establecimientos turísticos publicado en septiembre por la Xunta. Estas cifras podrían ser superiores, ya que existen viviendas irregulares, es decir, que no constan en el Rexistro de Empresas e Actividades Turísticas de Galicia (REAT), según han denunciado en varias ocasiones la Administración autonómica y el Concello.

Los principales usuarios de estos alojamientos son las familias seguido de las parejas y los amigos. Por el contrario, los principales clientes de hotel son las parejas, según el VI Barómetro del Alquiler Vacacional en España 2019, elaborado por la plataforma HomeAway y la Universidad de Salamanca.