La asociación vecinal de Labañou defiende que es posible un cambio del plan general (PGOM) que impida la construcción de 370 viviendas en As Percebeiras y que, dado el retraso en los trámites para el cambio en el plan especial para la zona, la modificación puede realizarse sin generar indemnizaciones, como el Concello sostiene que pasará si veta la construcción. La entidad sale al paso de las declaraciones en este diario de los responsables del proyecto de Metrovacesa e indica que no ha justificado con ningún estudio la ausencia de afección a la fauna ni que los bloques no vayan a dar sombra al resto del barrio.

Metrovacesa defiende que As Percebeiras respeta las vistas de la Torre que establece el plan genera y considera además que el terreno carece del valor natural que justifique una Evaluación Ambiental ordinaria, por lo que sostiene la Xunta debería agilizarla, y que su proyecto para la zona tiene como eje la "conectividad" con el grupo de viviendas María Pita. "Aunque se pusiera un bajo con una planta no se vería", explica el arquitecto en relación a las críticas efectuadas a las alturas previstas.

La asociación vecinal Francisco Rodríguez Otero sostiene que lo declarado por la promotora y el arquitecto "no se ajusta ni al propio plan por ella promovido y por él redactado". Ponen como ejemplo el razonamiento de que, dado que el subsuelo es rocoso, no pueden crecer plantas en el lugar que no sean gramíneas. Se pregunta la entidad por qué ellos mismos planean la plantación de arbolado y especies arbustivas en varias zonas del ámbito. Censuran que se diga que la fauna "no es destacable" cuando en el Documento ambiental estratégico (DAE) no contiene ningún estudio específico para el ámbito, cuestión que ya habían destacado en las alegaciones. También creen falto de justificación que el arquitecto indique que los bloques de edificios no generen per se sombra al grupo de María Pita, sino que es el relieve del municipio el que la ocasiona y solo entre las ocho y diez de la mañana. "El DAE non contiene ningún estudio" sobre la sombra, dicen los vecinos, que se muestran "sorprendidos" de que haga referencia "al relieve del terreno y no a los mamotretos de 14 plantas de altura que se prevé construir precariamente en la parte más elevada de los terrenos, con un frente de 60 metros hacia el grupo María Pita y solo una distancia de 17 metros".

Insisten en que el PGOM estipula que se tiene que ver la Torre desde toda la avenida y no solo desde un tramo, como señala la inmobiliaria, que deja 24 metros de la vía despejados hacia el monumento. Advierten además que no se especifica qué régimen tendrán las plazas públicas en el subsuelo. Finalmente, indican que ni Concello ni promotora han justificado que no se puede cambiar el plan general para convertir el espacio en zona verde. Apuntan que, una vez excedido el plazo de 4 años que el plan general (2013) establece para dar inicio a la tramitación especial, el Concello deja de tener responsabilidad patrimonial en el caso de alteración del planeamiento, según el artículo 48 del texto refundido de la Ley del Suelo.