Alcalde Canuto Berea, Plaza de la Galera, Voluntariado, Pasadizo de San Andrés. Estas cuatro calles del centro de la ciudad, ubicadas entre las muy transitadas Real y San Andrés, suman casi una treintena de establecimientos comerciales o de hostelería, pero sus responsables tienen muchas veces qué explicar cómo llegar a sus negocios y en qué parte de esa zona se encuentran. Entre la calle Real y al antiguo cine Coruña, suelen decir, pero no mucha gente sabe dónde estaba la vieja sala de proyecciones. Veinticuatro de esos locales han decidido hacer fuerza común para mostrarse más, para promocionarse y, al mismo tiempo, para revitalizar esa céntrica zona comercial. Se hacen llamar A Transversal, un estrecho eje de negocios que pretende dar aliento al pequeño comercio local.

"De esa debilidad que tenemos, al estar un poco escondidos, queremos hacer una fortaleza y, con ello, darle una entidad propia a una zona que no es sino un conjunto de entidades" , explica Yolanda Naya, promotora de la iniciativa. Hace poco más de un mes se le ocurrió la idea tras darle vueltas a la cabeza para encontrar una eficiente solución de marketing, y enseguida convenció a una veintena más de establecimientos para, entre todos, darse mayor visibilidad.

El grupo lo forman La Liada, Mie Moe, Cajón D-Sastre, Loco Blow Tattoo, De Lirios, Platabaluú, The Shock Store, Oliva&Co., Patapalo, Mundo Galego, Ruve, I3D Imprimetresde, Beauty, Comercio Xusto, Richard's Barbers, Nails Coruña, Banneton, Ave Paraíso, La Esmeralda, Gaolo, Inspiración, The New Look, O Ceo y O Candil.

La primera de sus operaciones será la organización de un sorteo de 250 euros en premios. En el periodo de un mes, entre ayer y el próximo 15 de noviembre, los locales comerciales de A Transversal darán a sus clientes tiques para participar en el sorteo de dos cenas en dos de sus establecimientos de hostelería, O Ceo y O Candil. Además, entregarán dos vales de 50 euros en efectivo cada uno que servirán para volver a comprar en los negocios agrupados.

"El comercio tradicional no está muerto, pero corre riesgos grandes", añade Naya. "El exceso de franquicias, los centros comerciales y la gentrificación perjudican al pequeño comercio de toda la vida". Estas amenazas y la necesidad de "empujar entre todos" al sector en un momento de incertidumbre como la pandemia del Covid dan ahora impulso a los comerciantes, algunos instalados desde hace mucho tiempo en ese eje transversal.