Si volver a casa por Navidad ya era una ardua y cara tarea antes de la pandemia, el coronavirus no ha hecho más que empeorarla. A dos meses de las fiestas, los coruñeses emigrados en Londres solo cuentan con una vía directa para poder llegar a Galicia, -tras la cancelación del enlace que Vueling ofrecía con Heathrow desde Alvedro-, la conexión de Ryanair con Santiago, una opción que, ayer, ya no era tal.

La compañía no oferta actualmente vuelos antes de las fiestas, el primer billete que se puede comprar es el día 26, aunque con una implicación que tampoco convence a los que tienen que llegar hasta A Coruña: El vuelo aterriza pasadas las diez de la noche. Si hay un retraso o si tienen que ir a algún punto más alejado de Galicia, les podría coger en la carretera la restricción horaria del toque de queda, que empieza a las once de la noche y, ayer, todavía no sabían si enseñando el billete les podrían dejar seguir en ruta sin multarles.

Fuentes de Ryanair explicaron ayer a este diario que, debido a las restricciones en la movilidad, están reorganizando su parrilla y que, próximamente, pondrán a la venta vuelos a partir del 15 de diciembre en Lavacolla y no operarán desde el 10 de noviembre hasta esa fecha en Santiago.

Víctima de estos cambios fue el coruñés Miguel Rodríguez, afincado en Londres, que compró el pasado lunes un billete para volar a Galicia el día 12 de diciembre, y así, garantizar que podría pasar las vacaciones de Navidad en casa. Tan solo unas horas después de haber efectuado la compra, con el billete de vuelta el 9 de enero, recibió un correo de Ryanair en el que le decían que su vuelo de ida se había cancelado por las nuevas restricciones impuestas.

Le ofrecieron la posibilidad de cambiar la fecha de su viaje. Entonces, intentó meterse en el vuelo del día 19, pero en la web ya no había plazas disponibles, se habían agotado cuando tan solo veinte horas antes el avión estaba aproximadamente al 70% de su ocupación. Lo intentó también en el enlace del día 15, pero con idéntico resultado. De modo que, para poder volver a casa por Navidad, la única alternativa viable era volar a otro aeropuerto con enlace o bien, la elegida por este coruñés en Londres, que pasa por volar a Porto con la compañía TAP, que sale a primera hora de la mañana de Heathrow y, de ahí, subir a A Coruña en bus. La posibilidad de cambiar el vuelo de Ryanair por uno con destino a Portugal tampoco le sirve, porque los aviones llegan demasiado tarde como para garantizarle que va a estar en casa a las once de la noche.

En tren desde Madrid

La cosa no mejora para los coruñeses que quieran planificar su vuelta desde Madrid en tren ya que, ayer, la web de Renfe solo ofrecía la venta de billetes hasta el 15 de noviembre, de modo que, al menos a través de la página de la compañía, no pueden reservar en diciembre por el momento. Otro inconveniente de estos trenes es que, uno de ellos, llega a San Cristóbal pasadas las once de la noche.