Óscar García es uno de técnicos encargados de impartir los talleres de ciberseguridad organizados por Afundación. Más de 1.600 escolares de 20 centros educativos gallegos se han sumado a estas clases que se realizan por streaming. La clave, opina el experto, está en que los estudiante sean conscientes de los "peligros" que hay en la Red.

¿Cuál es el objetivo de estos talleres?

Pretenden concienciar a los niños del peligro que entraña el uso de los servicios y las redes sociales. Ellos tienen la falsa sensación de que son intocables.

¿Cómo se elimina esa sensación?

Les sometemos a una serie de cosas que les pueden pasar, pero le pasa a nuestro personaje. Ahí van bajando ese nivel de intocables. Queremos concienciar de que los peligros están ahí, cómo reconocerlos y darles consejos para que estén prevenidos. Que adquieran ese hábito desde pequeños.

¿Qué cosas deben tener en cuenta?

Que si alguien les manda una solicitud, deben comprobar de quién se trata. Tener las configuraciones bien puestas y no aceptar a alguien que no conocen en persona. Sobre todo ahora que usan tanto aplicaciones como TikTok. Se supone que los menores no pueden tener esas cuentas, pero las tienen.

¿Es necesario que se impliquen las familias en este control?

Sí. Hay que decirles a los niños que los padres tienen que saber que tienen esas cuentas, pero si los padres son se implican, es muy difícil. Esas cuentas tienen que estar bajo la supervisión de un tutor. Si no lo están, es porque el niño ha mentido. Les queremos enseñar que los malos también mienten y ellos se ponen en riesgo en internet. Les enseñamos a hacer búsquedas de perfiles falsos. Si el niño es responsable, seguirá nuestros consejos. Pero no dejan ser niños, así que es importante que los padres sepan en todo momento lo que están haciendo.

¿Es un problema que las nuevas generaciones sean nativos digitales?

Sí, porque eso hace que no sean conscientes del peligro. En los talleres, ellos usan móviles, ordenadores y tablets y un hacker les muestra el peligro de, por ejemplo, utilizar una wifi pública. Todos dicen "a mí nunca me han hackeado", pero eso no lo saben. Les ponemos la situación en clase, y les decimos que pongan el correo del colegio y una contraseña nuestra. ¿Quién dice que no lo ha hecho en un centro comercial con la wifi pública? Cuando lo ven in situ, les impacta más. Ahí empiezan a recelar y se toman más en serio sus datos. Esa información que está en internet es su identidad digital y la van a arrastrar para siempre. Comentarios, fotos? Por mucho que lo quieras eliminar, si lo publicas, eso queda ahí. Cuando sean mayores, querrán buscar trabajo y entrar en la universidad, y los van a buscar. Tenemos que hacerles perder esa inocencia. Tienen que usar las redes, pero con conocimiento.

¿Hay una edad recomendada a la que los niños pueden empezar a usar móviles?

La edad concreta va a depender de la supervisión de los padres y el tipo de dispositivo. A lo mejor con diez años le dan una tablet para el colegio. Eso está bien. Pero no solemos recomendar que tengan un móvil antes de los 12 años. Y sabemos que hay casos. Deben ser supervisados. Lo que notamos es que hay una falta de formación y concienciación sobre el tema.