Las situaciones de crisis ponen a las personas al límite, pero, a veces, sacan lo mejor de cada uno. Así lo ejemplifican en el restaurante El Rincón de Alba, situado en la rúa de A Franxa, donde se han propuesto destinar el 30% de su facturación semanal a distintas iniciativas de la ciudad. Un proyecto con el que buscan contribuir con los colectivos que se han llevado la peor parte de la pandemia, y mostrar, al mismo tiempo, la mejor cara del sector de la hostelería. "Cuando reabrimos en verano, la gente nos respaldó mucho. Lo pasamos mal y estamos muy agradecidos con nuestra clientela y con los sanitarios", asegura Iago Cagiao, propietario del restaurante. Cada semana irán variando su contribución: la semana pasada, escogieron enviar una suculenta cena a los sanitarios de la UCI de coronavirus del Hospital de A Coruña. "Esta semana, además del 30%, por cada pedido que se haga al restaurante, donaremos un kilo al Banco de Alimentos", confirma Cagiao.