La reactivación de la pandemia del coronavirus en los últimos meses hace que el volumen de pasajeros del autobús urbano no termine de recuperarse. Las cifras del mes de septiembre proporcionadas por el Gobierno local reflejan que el número de viajes realizados fue de 1.206.242, un 38,5% menos que en enero, cuando alcanzaron los 1.963.593.

A pesar de las medidas adoptadas por el Concello y la Compañía de Tranvías para garantizar la seguridad sanitaria de los viajeros, el número de trayectos sigue por debajo de los números habituales, aunque se ha recuperado notablemente con relación a abril, primer mes completo en el que estuvo vigente el estado de alarma, en el que solo se efectuaron 188.683 viajes.

A partir de ese momento el número de trayectos realizados subió de forma lenta mes a mes, hasta llegar a los 1,1 millones en julio, ya con el estado de alarma levantado. El periodo vacacional de agosto hizo que los viajes descendieran levemente ese mes para experimentar un impulso en septiembre, aunque aún lejos de la normalidad.

El inicio de la pandemia obligó a la Compañía de Tranvías a reducir de forma notable el servicio que ofrecía, ya que el estado de alarma llevó a muchos trabajadores a realizar sus labores profesionales desde sus hogares, mientras que el confinamiento severo suspendió todas las actividades no esenciales durante quince días, lo que afectó seriamente al volumen de pasajeros del bus urbano.

Tranvías no solo llevó a cabo una desinfección a diario de los elementos más accesibles de sus vehículos, sino que la amplió a la totalidad de su interior dos veces a la semana mediante la contratación de una empresa externa especializada en esta actividad. Con las restricciones impuestas a la ciudad por la Xunta en las últimas semanas, el aforo permitido en los autobuses urbanos queda fijado en la totalidad de las plazas sentadas y la sexta parte de las de pie.