La decisión del Gobierno local de duplicar la tasa municipal por apertura de salones de juego, bingos y casinos, que pasará de 744 a 1.488 euros, hace que la asociación Agalure plantee que esa medida se aplique a todos los negocios relacionados con el juego. El colectivo, que trabaja en la rehabilitación de personas con adicciones, se declara a favor "del acceso a todo tipo de juego", pero también a que haya una regulación del mismo, según destaca su secretario, Gerardo Rodríguez.

En opinión de Agalure, la duplicación de la tasa de apertura de nuevos establecimientos que cobra el Concello no desanimará a ninguna empresa del sector del juego que tenga proyectada una iniciativa de este tipo, por lo que tampoco influirá en la expansión de esta actividad económica, que ha sido muy notable en los últimos años.

"Si parte de esa tasa va a ser dedicada a tratamiento y rehabilitación, bienvenida sea", comenta Gerardo Rodríguez sobre la justificación aportada por el Gobierno local en torno a la subida del importe de las licencias de apertura, de la que Agalure carece de información oficial, ya que el informe municipal sobre esta medida alude a la necesidad de aumentar los ingresos destinados al tratamiento y prevención de las ludopatías. Esta asociación es una de las de carácter asistencial con las que el Concello firma anualmente un convenio nominativo con el que contribuye a la financiación de sus actividades, que este año tuvo un importe de 20.000 euros.

Competencias

La entidad pone de relieve además que el Concello no puede intervenir de forma directa en la apertura de nuevos locales destinados del juego, ya que es una competencia de la Xunta, que trabaja en la redacción de una nueva ley para este sector. Agalure considera beneficiosa para su actividad la iniciativa del Gobierno central de limitar los horarios de la publicidad televisiva de las casas de apuestas y su patrocinio a equipos deportivos, ta que estima que "hay una oferta desmedida de comunicaciones comerciales con respecto a todos los juegos y hay que ponerle freno", según explica Gerardo Rodríguez, para quien en este momento son necesarias "más medidas tanto del regulador estatal como del autonómico para la prevención y el tratamiento de las adicciones".

Al exponer su voluntad de incrementar la tasa de las licencias de apertura de negocios relacionados con el juego, además de aumentar los recursos para la rehabilitación, el Gobierno local aludió al aumento experimentado en el número de establecimientos de este tipo, así como en el consumo del juego por personas con edades entre los 18 y los 25 años. Según el Ejecutivo municipal, con la subida de la tasa se pretende responder a la demanda social que reclama más protección social frente al juego, que el Concello trata de aportar mediante las subvenciones a las asociaciones que trabajan en este campo.

Esta argumentación no fue aceptada por el Tribunal Económico-Administrativo Municipal, que debe emitir un informe sobre todas las propuestas de ordenanzas fiscales pero que no tiene carácter vinculante. Para el tribunal, la subida planteada por el Gobierno local no tenía una motivación suficiente y cuando reiteró esos mismos argumentos para justificarla, le recordó que la tasa debe ser calculada "en función del coste que tiene para el Concello la tramitación de los expedientes de apertura". Ante la falta en el informe de datos que avalaran el aumento de la tarifa, destacó que "no se realiza ningún análisis numérico que permita apreciar su justificación cuantitativa".