El Gobierno local pospone la peatonalización de calles prevista en el proyecto de remodelación de ese entorno. A pesar de que la iniciativa planteaba la prohibición del tráfico rodado en Estrecha de San Andrés y Marqués de Pontejos, el Ejecutivo municipal anunció ayer que inicialmente se permitirá circular por ellas y que la restricción que un estudio aconseja implantar en determinadas horas no se aplicará hasta que se acuerde con los vecinos y comerciantes de la zona.

Precisamente algunas de esas personas iniciaron este mes la recogida de firmas para expresar su rechazo al proyecto y reclamar más plazas de aparcamiento. El concejal de Urbanismo, Juan Díaz Villoslada, manifestó ayer que la peatonalización de todas las calles que rodean al mercado no estaba prevista en el proyecto, que recibió el informe favorable del Consello Territorial de Patrimonio de la Xunta y que, según el Concello, incorpora propuestas de los vecinos, placeras y comerciantes. Villoslada destacó que el proyecto fue presentado a las placeras en julio y que a propuesta suya se mantendrán las plazas de la ORA en rotación con una estancia máxima de una hora, al igual que sucede en el entorno de otros mercados coruñeses.

También en julio se expuso esta iniciativa a los miembros de la Mesa da Cidade Vella y a la Asociación de Vendedores del Mercado de San Agustín, según el Concello, que asegura que habrá plazas de aparcamiento para residentes en respuesta a la reclamación de los vecinos, ya que en los edificios de la zona son escasos los garajes.

El Gobierno local añadió que el 13 de octubre Villoslada y la concejala de Comercio, Diana Cabanas, se reunieron con la asociación Área Obelisco para recoger sus propuestas y se comprometieron a no aplicar peatonalizaciones por el momento.

Villoslada destacó que la reforma de este espacio incluirá mejoras de la accesibilidad como la comunicación entre las calles Panaderas y Pío XII a través de un edificio situado entre ellas, así como con la extensión del recorrido de los autobuses urbanos hasta la calle Sol, como hacían en el pasado, para facilitar la llegada de clientes al mercado.

El proyecto tiene un presupuesto de 822.579 euros e implantará en estas calles plazas de la ORA para residentes y de rotación, más zonas de carga y descarga, así como un aumento de las áreas peatonales, en las que además se cambiará el pavimento, se plantarán árboles y se instalará un nuevo mobiliario urbano.

Uno de los lugares en los que se suprimirá el tráfico es el tramo de Pío XII entre Juan XIII y la calle San Agustín en el que se halla la parte trasera de la iglesia de San Jorge. Otra de las actuaciones que se desarrollarán será una nueva distribución de las plazas de aparcamiento para que el movimiento de los vehículos no perjudique a los peatones. Uno de los objetivos de la reforma es que pueda contemplarse mejor el edificio del mercado, diseñado en los años treinta por los arquitectos coruñeses Santiago Rey Pedreira y Antonio Tenreiro Rodríguez.