La modificación del plan general, cuyo trámite ha iniciado el área de Urbanismo, incluye una nueva calificación para los espacios abandonados del andén de Riazor. Son los locales situados entre el Playa Club y las Esclavas, a los que se puede acceder desde la parte inferior del paseo marítimo. Hoy en manos de la concesión de Dépor Hostelería, en el plan general de 2013 no se especifica su calificación. Con el cambio, quedan regularizados como equipamiento público de contingencia, esto es, un equipamiento pero sin uso predefinido. Sigue pendiente la reactivación de las instalaciones del Concello, para la que habría que rescatar la concesión, vigente hasta 2042.

La resurrección de los locales fue uno de los caballos de batalla de la actual concejala de Deportes, Mónica Martínez, cuando estaba en la oposición, y lo estableció como prioridad cuando tomó posesión como parte del Gobierno local. Un mes antes, en agosto, el Pleno había aprobado una de sus mociones en las que se instaba al Concello a negociar con la actual concesionaria la recuperación de los arcados, iniciar un expediente "de alcanzarse un acuerdo" y, una vez recobrados, darle "un destino a favor de la ciudadanía acordado por todos los grupos municipales de la Corporación".

En la modificación de la norma de equipamientos del plan general, Urbanismo trata de regularizar también la situación de la cúpula y el restaurante del Monte de San Pedro. Actualmente, están insertos en el ámbito del parque, como parte de la zona verde. Ahora pasarían a ser también equipamientos públicos. El Concello abrió recientemente un procedimiento participativo para que los vecinos aportasen ideas para convertir la cúpula de San Pedro en un museo. El restaurante, con el ascensor, se gestiona en régimen de concesión y está en manos de una sociedad de la que forma parte el chef Luis Veira.