Los primeros pasos para la modificación del Plan General de Ordenación Municipal (PGOM) relativos a la norma zonal 6.2 industrial, es decir, polígono de Agrela, se daban en 2016. Un año después, desde la asociación de empresarios solicitaban al Concello que la norma urbanística fuese menos restrictiva. En el momento actual, cuando ya han pasado cuatro años, el cambio urbanístico sigue paralizado y no parece que vaya a producirse al menos a corto o medio plazo. Esta modificación en el plan general serviría, por ejemplo, para “facilitar las licencias de apertura”, como explica la gerente de la asociación, Teresa Firvida.

Destaca que desde el Ayuntamiento “tienen mucha información y propuestas y hay voluntad de hacerlo”. Por su parte, desde el Gobierno local se limitan a asegurar que están “trabajando en el tema” sin detallar ningún tipo de previsión de cuándo podría ser un hecho o en qué línea quieren avanzar.

Toda esa información comenzó a llegar al Ayuntamiento en septiembre de 2016, cuando el Concello aprobaba el inicio del expediente para la modificación puntual del plan general para esta zona. La incoación permitía a la administración local comenzar a estudiar el régimen de autorización de los usos, las construcciones admisibles en la franja de retranqueo perimetral y el acceso a las parcelas.

“El polígono es muy antiguo y ha evolucionado muy rápido”, apunta Firvida, por lo que es necesario dar solución a una serie de problemáticas y, de este modo, favorecer la apertura de nuevos negocios. “El Ayuntamiento está de acuerdo en buena parte”, aunque de momento no hay ningún borrador, asegura Firvida.

La estimación que tienen desde la Asociación de Empresarios de Agrela es que “el próximo año empiece ya. Nos toca a nosotros, pero es solo una impresión”.

Los empresarios reactivaban esta modificación en 2017 después de detectar problemas a la hora de realizar cambios en sus parcelas. Enumeraban, entonces, como ejemplo la instalación de un control de seguridad en la entrada, dotar de escalera el exterior de las naves o levantar un cerramiento.

Edificabilidad de las parcelas

El PGOM en esta zona estipula que la ocupación máxima de las parcelas sea del 70% y, en cuanto al retranqueo, que la fachada tiene que estar como mínimo a cinco metros de la alineación. Los aparcamientos deben ser bajo rasante y, en superficie, dentro del 70% de ocupación, salvo que fuera necesario superar dos plantas de sótano para albergar el mínimo de plazas a las que obliga el plan general y para plazas de movilidad reducida.

Respecto a los espacios libres, la norma urbanística solo permite plantaciones arbóreas y pequeñas edificaciones, siempre que sean de tipo temporal. En esta línea, se prohíbe convertirlos en depósitos de materiales, vertidos de desperdicios o cualquier uso que afecte a la estética del conjunto del polígono.