Las restricciones impuestas por la Xunta en A Coruña y la mayor parte del área metropolitana hacen que la movilidad haya regresado a los niveles de la desescalada del confinamiento, según reflejan los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) tomados a partir del seguimiento de los teléfonos móviles. Los 46.519 desplazamientos de personas fuera de su distrito de residencia que se produjeron el 18 de noviembre suponen que solo lo hace poco menos de la quinta parte de la población de la ciudad y son ligeramente superiores a los 45.300 contabilizados, un 19,3% de la población, el 13 de mayo.

Esa fecha se situó en la primera fase de la desescalada, cuando se empezaba a poder salir de sus domicilios para algo más que para hacer compras o trabajar. Frente a esas cifras, el 15 de julio, ya con el estado de alarma levantado y en pleno verano, el INE registró en A Coruña 63.389 personas que salieron del distrito en el que viven.

Los datos son reveladores si se analizan también por distritos, ya que en esa fecha en el que menos movimientos externos se realizaron, el de Riazor-Labañou-Os Rosales, en el que afectaron al 23,84% de su población, supera al que el 18 de noviembre registró un mayor porcentaje de salidas a otros distritos, el de Agrela-Bens, donde se alcanzó un 22,96%.

La imposibilidad de salir del municipio salvo por motivos laborales o causas de fuerza mayor, la prohibición de circular por la vía pública entre las 23.00 y las 06.00 horas, además del cierre de la hostelería, decretadas por el Gobierno gallego a raíz del incremento del número de contagios en la comarca coruñesa, tienen un efecto apreciable sobre la movilidad de las personas más allá de su entorno más inmediato, según demuestra esta estadística de movilidad.

A pesar del fuerte descenso experimentado por la movilidad a causa de las medidas impuestas, todavía están lejos de las que se alcanzaron durante el confinamiento. Los datos recabados por el Instituto Nacional de Estadística el 7 de abril, día laborable de la Semana Santa en el que además se suspendió toda la actividad económica no esencial, reflejaron que solo 27.833 coruñeses habían salido de su área de residencia, un 12% de la población de la ciudad.

Los datos recabados por el INE reflejan a lo largo de toda la pandemia que el número de desplazamientos de un distrito tiene una relación directa con su población, aunque a la inversa, ya que cuanto menor es el número de habitantes, más crece el porcentaje de personas que salen de él a diario.

Esto hace que, además de Agrela-Bens, Mesoiro-Castro de Elviña sea el que contabiliza más movimientos, seguido del de Ensanche-Cuatro Caminos y Os Mallos-Sagrada Familia.

Por el lado contrario, además del ya mencionado Riazor-Labañou- Os Rosales, que se sitúa como el que menos movilidad exterior genera, el de Os Castros-Elviña-O Castrillón le sigue en esa clasificación, a pesar de ser el que concentra un mayor número de población, que con 54.254 personas agrupa a casi uno de cada cinco coruñeses.

Otro de los datos que proporciona el estudio del INE sobre la movilidad cotidiana es la procedencia y el destino de las personas que se desplazan entre los diferentes distritos. En este caso, el de Os Castros-Elviña-O Castrillón es el que muestra cifras más altas en ambos sentidos, ya que de ese distrito salen personas con dirección a 31 destinos y llegan desde otros 27.

El que cuenta con un menor número de lugares a los que se desplazan sus habitantes y desde los que llegan sus visitantes es el del Agra do Orzán, con 15 y 14 respectivamente, a muy corta distancia de Os Mallos-Sagrada Familia, donde esas cifras son de 16 y 15 destinos y lugares de origen.

Los datos del distrito en el que se registra un mayor número de puntos de origen y de destino sirven de muestra para poner de relieve que, a pesar de las restricciones a la movilidad que se aplican desde hace semanas, a causa del crecimiento de los contagios, los desplazamientos siguen siendo notables, incluso fuera del término municipal. Así, Oleiros, con 1.524 personas, era el 18 de noviembre el lugar de destino más habitual para los vecinos de Os Castros-Elviña-O Castrillón, incluso por delante del resto de la ciudad.

A renglón seguido se situaban el distrito de Ensanche-Cuatro Caminos con 1.373 personas, el de Eirís-As Xubias con 666 y el de Ciudad Vieja-Pescadería con 659 personas. Arteixo es el siguiente municipio que recibía más habitantes de esa zona, con 548, a lo que contribuyen las numerosas empresas asentadas en la localidad, mientras que Culleredo atrajo ese día a 434 personas. Cambre recibió la visita de 238 vecinos de ese distrito y Bergondo 117.

Ya más allá del área metropolitana, Carballo contabilizó a 79 personas, el distrito 8 de Ferrol a 50, Narón a 39, mientras que Fene y Cabanas a 34. Entre tres distritos municipales de Santiago sumaron 81 desplazamientos de residentes en ese distrito, Curtis y Aranga 25, Ordes otros 25 y Ares 21.

En relación con la procedencia de quienes llegan a Os Castros-Elviña-O Castrillón, el municipio de Oleiros vuelve a ser el lugar que reúne a un mayor número de desplazamientos, con 1.056. A continuación se ubican el distrito de Os Mallos-Sagrada Familia, con 922, y el de Ensanche-Cuatro Caminos con 797.

La capacidad de atracción de foráneos de este distrito queda reflejada en que Culleredo es el cuarto lugar de origen, con 625 personas, mientras que de Arteixo, ya más abajo en esta clasificación, llegaron 432 residentes. De Cambre procedieron 368 personas, de Carballo 140 y 122 de Sada, aunque hay contabilizados viajeros que llegaron de otros trece municipios.