El Concello ha remitido una comunicación al Sergas para que detalle en qué consiste la ampliación de volúmenes que realizará sobre las instalaciones actuales y estudiar, a partir de ahí, si se puede agilizar la licencia para las obras con las que se completa el plan director del Hospital de A Coruña de 2001, que la Xunta ha bautizado como “Fase 0” del “Nuevo Chuac”.

En principio, los técnicos municipales sostienen que, como exige la normativa urbanística, se debe tramitar un estudio de detalle —un proyecto pormenorizado de ordenación que se debe someter a exposición pública— dados los cambios que la Xunta introduce en el complejo sanitario. El permiso fue solicitado en junio por el Sergas. Las tasas fueron pagadas hace dos meses y el informe obligatorio de la Agencia de Seguridad Aérea fue recibido el mes pasado.

Según explican fuentes municipales, hay un desfase de unos 600 metros cuadrados respecto al actual volumen de las instalaciones, en las que se pretende obrar. Con esta cuestión sobre la mesa, el proyecto obligaría a la tramitación de un estudio de detalle debido a edificios nuevos en planta baja. El Sergas ha respondido, a través de un correo electrónico y sin comunicación personal, que “no hay incrementos de volumen ni edificios nuevos en planta baja” aunque reconoce la existencia de un voladizo nuevo “necesario para dotar a la UCI de boxes de mayor tamaño”. Argumenta que no “supone la alteración de condiciones volumétricas del conjunto”. Rebaja el incremento a 180 metros cuadrados y exige una “licencia directa”.

La reforma del hospital suma así un nuevo capítulo de desencuentros entre la Xunta y el Concello, tras las discrepancias para la firma del convenio, aún pendiente. El Concello muestra su disposición a colaborar y, en el caso de que el aumento de volumen esté justificado por tratarse de instalaciones auxiliares y desmontables, se podría “estudiar el camino” para agilizar la tramitación del permiso para obrar.