Técnicos del Ayuntamiento y responsables de Desarrolla Obras y Servicios, empresa que lleva a cabo las obras en la calle Rey Abdullah que causaron el derrumbe de un muro pantalla y el realojo de 34 familias de dos edificios, tuvieron ayer “una reunión de coordinación” para trazar un plan para el regreso de los vecinos a sus casas y para analizar la seguridad de los inmuebles y el avance de los trabajos. Desarrolla remarca que “no existe ningún tipo de daño en los edificios colindantes” (números 82-80 y 76-78 de la avenida de Finisterre) y calcula que los afectados “podrían volver” a sus domicilios “en una semana”, tras realizar doble turno de trabajo, cuando fuentes municipales creían el jueves que el regreso podía demorarse tres semanas.

Los responsables del Concello volverán a la zona el lunes para tener una nueva cumbre “de seguimiento” y evaluar si las actuaciones se ajustan a lo deseado y si es posible cumplir con los plazos que marca la empresa o es necesario ajustarlos por ambas partes. Desarrolla asegura que sus esfuerzos en el solar se centran “en consolidar la zona donde se desprendió el tramo de muro de sótano”. Desde ayer “se porta tierra de relleno en el solar con el objetivo de levantar una bancada horizontal”. Estos trabajos previos para rellenar el socavón permitirán “instalar una máquina que proceda al bulonado del macizo rocoso en el que se asientan los edificios” afectados de la avenida de Finisterre.

Mientras, los vecinos que así lo han considerado fueron realojados en el hotel Riazor tras el episodio vivido en la madrugada del miércoles al jueves cuando algunos oyeron “un fuerte ruido” que les alertó del derrumbe. En cuanto tuvieron conocimiento de lo ocurrido, los bomberos, la Policía Local, la jefa de Urbanismo y el técnico municipal de Ruinas avisaron de “un riesgo estructural” en los dos inmuebles más próximos a las obras de Rey Abdullah tras inspeccionar el solar, donde la empresa prevé levantar dos bloques de 31 y 16 viviendas con cuatro sótanos para aparcamiento. Así, el Concello ordenó el realojo de los inquilinos de las 34 viviendas afectadas.