Un bus articulado invade parte de la acera de la calle Sol. | // LA OPINIÓN

Las redes sociales y grupos de Whatsapp recogen desde el lunes quejas de padres y madres de escolares por el giro que los buses urbanos que circulan por San Andrés hacen para entrar en la calle Sol, una maniobra que realizan desde la semana pasada y en la que, debido al ángulo cerrado del cruce y a la estrechez de las dos calles, obliga a los vehículos a invadir parte de la plataforma reservada para los peatones. Los usuarios advierten del riesgo que supone el giro de los buses para los menores —y, por extensión, para todos los viandantes— que caminan por ese punto, y han escrito que protestarán al Ayuntamiento a través del teléfono 010. La nueva parada del bus ubicada en San Andrés a pocos metros de ese cruce es, en cambio, bien vista por los comerciantes, sobre todo porque creen que con ella se evitará la ocupación de los arcenes por vehículos durante todo el día, entre ellos los de carga y descarga de mercancías.

La alcaldesa, Inés Rey, recogió la impresión de los trabajadores del entorno hace unos días. En general, aprueban la instalación de la parada del bus, que supone la eliminación de la que antes se había colocado junto al cruce con Rúa Nueva, aunque cuestionan la plataforma portátil escogida para delimitar el espacio para subir y bajar del bus, piden que se desplace unos metros atrás, hacia la iglesia castrense y, sobre todo, piden contundencia para penalizar el estacionamiento continuo de coches en los laterales de San Andrés.

“Yo estoy encantada con la parada y en la farmacia sé que también están. Quien viene en bus ahora se puede parar aquí sin pasar de largo hacia la siguiente y comprar en los comercios. Era algo que además pedían los comerciantes de San Agustín porque la parada de Rúa Nueva les quedaba muy lejos, la de la plaza de España también, y el bus no pasa por Panaderas”, explica Carmen Pico, de Azafranes Bernardino.

A favor de la nueva parada están también los socios de la vinoteca O Ceo, aunque han solicitado al Concello que retrase el apeadero porque están a la espera de recibir un permiso municipal para instalar terraza justo delante de la entrada a la calle Sol. “Esta parada es fea e insegura. Se acaba de caer una señora y cuando vino la ambulancia reventó una rueda al subirse a la plataforma. La alcaldesa nos ha dicho que tenemos razón en pedir un pequeño cambio porque esperamos por la licencia para la terraza”, cuenta Marcos Regueira.

A Óscar Castro, responsable de la tienda de ropa Butcher Shop, le parece acertado que el bus se detenga ante su tienda porque sabe, asegura, que el Concello combatirá el estacionamiento indebido de coches en los márgenes de San Andrés a lo largo del día obstaculizando el paso de los peatones y provocando problemas de circulación, que se agravarían con el paso de los buses ahora. “Nos han dicho que van a poner bolardos y bancos para que no se aparque delante de los comercios”, señala.

Tres meses cortado un carril en San Roque

Un carril de la avenida de Gran Canaria está cortado desde ayer hasta el día 30 de abril debido a la ejecución de obras de saneamiento y pavimentación en la zona, según informa la Policía Local de A Coruña. Los trabajos se desarrollarán en el carril de subida, en sentido al barrio de Os Rosales, y afectarán durante más de tres meses al tramo comprendido entre las intersecciones con las calles Venezuela y Archer Milton Huntington, que estará cerrado a la circulación hasta el mes de mayo, según las previsiones que maneja el 092. La Policía Local también informa de que a partir de ahora se recupera el giro a la izquierda en Rúa Nueva hacia San Andrés. La maniobra estaba prohibida desde hace un mes por trabajos en dos tramos de la calle San Andrés, uno de los cuales se abre ahora tras tener vetado el paso de vehículos en los dos sentidos de circulación.