La sede coruñesa de Naturgy vuelve a sufrir una pérdida de empleo con la decisión de la dirección del grupo de trasladar a Madrid el Centro de Control Operativo de Unión Fenosa Distribución y a los 28 empleados que prestan servicio en el mismo para vigilar el correcto funcionamiento de la red de media y baja tensión de Galicia, así como la de alta tensión, que también abarca la provincia de León. La medida, que la empresa considera una “mera reorganización interna”, cuenta con el rechazo frontal de los representantes sindicales, ya que a los afectados no se les ofrece una alternativa a la mudanza a la capital española, ya que si esta propuesta no es aceptada, perderían sus puestos de trabajo.

El comité de empresa destacó que la práctica totalidad de los empleados del centro tienen entre treinta y cuarenta años e hijos en edad escolar. También mencionó que hacen frente a hipotecas y sus cónyuges trabajan, por lo que un traslado implicaría la pérdida de un empleo de la pareja y cambiar de vivienda en plena pandemia.

Naturgy manifestó a este periódico que su iniciativa “no implica ningún despido” porque a todos los trabajadores se les ofrece desempeñar la misma labor en el Centro de Control Operativo de Madrid y que para la compañía es una “prioridad buscar soluciones negociadas y pactadas con todos los empleados”. También destacó que desde Galicia se prestan servicios al resto de España con departamentos como el Centro de Control Integrado de Infraestructuras Hidráulicas.

El grupo energético inscribió el traslado del Centro de Control Operativo de A Coruña en una reestructuración que supondrá traer a esta ciudad las direcciones de Medioambiente y de Planificación de Red de Unión Fenosa Distribución para toda España, que hasta ahora se encuentran en Madrid.

Para justificar el cierre de la instalación coruñesa, Naturgy recordó que Unión Fenosa Distribución disponía en el año 2000 de siete centros de control operativo, pero que “las nuevas tecnologías y la digitalización permiten dar cobertura a toda la red desde un único punto”. Para respaldar su decisión, destacó que tanto los centros de Madrid como el de A Coruña pueden operar en toda la red de la compañía en España.

“El traslado no tiene sentido cuando el trabajo se puede hacer desde aquí perfectamente”, replicó a estos argumentos Luciano Vallín, presidente del comité de empresa del centro de trabajo de Unión Fenosa Distribución en la avenida de Arteixo, quien puso de relieve que la entrada en el accionariado del grupo de fondos de inversión ha incrementado la reducción de personal en los últimos años. En el complejo de la avenida de Arteixo, frente a la rotonda de Agrela, trabajan en la actualidad 120 personas, que se reducirían a menos de cien con el traslado del Centro de Control Operativo.

Vallín admitió que el centro de Madrid puede asumir las funciones del de A Coruña, pero que si el primero falla, habría que acudir a uno de reserva situado en esa misma ciudad y que durante el traslado se perdería el control de la red. También resaltó que la ubicación del centro en Galicia le beneficia por el conocimiento del terreno y el idioma de los trabajadores, para lo que recuerda que el clima y la dispersión de la población hacen que la red eléctrica gallega sufra muchas incidencias por el viento y las tormentas.

El representante sindical manifestó que se intentará dialogar con la dirección, pero si no se consigue la continuidad del centro, se reclamará que todos los empleados sean recolocados en Galicia salvo aquellos que prefieran trasladarse a Madrid. En caso de que estas expectativas no se vean cumplidas, el presidente del comité no descarta que se convoquen movilizaciones de protesta.

“Nos lo olíamos porque hace más de un año se amplió el centro de Madrid y al preguntar por qué contestaban con evasivas”, señaló Vallín, quien añadió que el comité de empresa fue informado el martes del cierre del centro y del traslado a Madrid de los 28 trabajadores, y, aunque se ofrece una negociación con los afectados, no se plantean alternativas a la marcha a la capital.

Sobre el anuncio de la empresa de la llegada a A Coruña de departamentos hasta ahora ubicados en Madrid, el portavoz sindical indicó que existen “rumores” sobre la creación de un centro de control de instalaciones de energías renovables, como parques eólicos y centrales hidráulicas, pero que la empresa no informa sobre esta cuestión. En caso de que finalmente se pusiera en marcha ese centro en la ciudad, Vallín considera que los trabajadores a los que ahora se plantea el traslado podrían optar a ocupar esas plazas.

El Centro de Control Operativo de Unión Fenosa Distribución está ubicado en una sala blindada y con acceso restringido, ya que en su interior se desarrolla la supervisión del funcionamiento de toda la red eléctrica gallega. Los medios técnicos disponibles en esta instalación permiten adoptar medidas en las subestaciones desde el propio centro, aunque su principal misión es la coordinación de todo el personal de mantenimiento y averías, al que se dan órdenes desde A Coruña para la intervención cuando se producen incidencias.

Estas características hacen que el centro esté operativo durante las 24 horas del día y a lo largo de todo el año, por lo que Luciano Vallín, que desempeñó su actividad laboral en ese lugar durante años, califica su trabajo como “crítico”. El personal que presta servicio en el centro está además especializado en el control de la red, para lo que recibe formación durante varios meses antes de ocupar un puesto en ese departamento con el fin de garantizar la seguridad en el funcionamiento de la red eléctrica.