La ilusión por tener un hijo se puede sentir estos días en la calle de la Franja, donde la tienda de recuerdos Brigantium permanece cerrada por un permiso de paternidad. Lo anuncia un cartel hecho con mucho cariño y creatividad. Colgado en la puerta, se pueden ver unos pies de un recién nacido que anuncian que el establecimiento estará cerrado para atender al pequeño. El dueño de este local de regalos no solo se ha esforzado en hacer un bonito anuncio sobre su hasta luego, sino que también deja sus redes sociales y su número de teléfono para estar localizado. “Para lo que necesites, ponte en contacto con nosotros”, dice a sus clientes.