El Concello inicia la cuenta atrás y el proceso para “blindar” el frente marítimo de As Xubias, “una zona virgen y poco consolidada”, dentro del año de plazo que activó al suspender el Pleno el pasado mes de noviembre las licencias urbanísticas en casi todo el tramo comprendido entre la playa de Oza y el puente de A Pasaxe, quedando excluido de esta medida el núcleo tradicional de As Xubias de Abaixo, que ya cuenta con una normativa específica que garantiza su conservación.

El paso que ha dado el Gobierno local, el primero de un proceso que espera culminar en los últimos meses de 2021, fue sacar a concurso la asistencia técnica para modificar las normas urbanísticas que rigen a día de hoy en la zona, que vienen derivadas de una modificación de la ordenación en 2008 que hereda el plan general de 2013. El plazo para la conclusión del proceso es de nueve meses, aunque la salvaguarda de la zona que busca el Concello llegará antes, en los pasos intermedios.

En seis meses, el equipo tiene que redactar los documentos para que la Xunta de su permiso ambiental (tres meses) y los documentos que irán a Pleno para la aprobación inicial (tres meses). La Corporación tendría que ratificar la propuesta antes de que se cumpliese el año de la paralización de licencias para que esta no expire y los constructores puedan pedir permiso para edificar con sus antiguos derechos suspendidos.

La licitación busca “contratar un equipo técnico multidisciplinar” que redacte un documento que llevarán acabo bajo ciertas premisas que recoge la Ley de Regeneración Urbana de 2013 como “posibilitar el uso residencial en viviendas de domicilio habitual en un contexto urbano seguro, salubre, accesible, de calidad e integrado socialmente”, “favorecer y fomentar la dinamización económica y social y la adaptación, la rehabilitación y la ocupación de las viviendas vacías o sin uso”, “mejorar la calidad y la funcionalidad de las dotaciones, infraestructuras y espacios públicos”, “garantizar la movilidad en coste y tiempo razonable” o “integrar en el tejido urbano cuantos usos resulten compatibles con la función residencial”, según recoge el pliego de condiciones de la licitación.

El Ejecutivo local impulsó en octubre la suspensión de las licencias en el sector, que cuenta con elementos patrimoniales que debe proteger como el núcleo de As Xubias de Abaixo y el Pazo del Inglés, así como equipamientos públicos y privados. Entre estos últimos se encuentran el colegio de educación especial María Mariño, el Santiago Apóstol, el Materno Infantil y Santa María del Mar.

Entre los proyectos que han sido paralizados figura el que estaba previsto en los antiguos terrenos de Valiña, en el que desde 2005 se intenta promover un complejo residencial y con cuyos actuales propietarios negoció el Gobierno local de Marea y ahora el del PSOE para rebajar sus derechos de edificabilidad. El espacio entre ese solar y la ría debe ser por el que discurra el futuro paseo que llegará a A Pasaxe, por lo que el proyecto estará condicionado por esa actuación, aunque también influirá la base náutica que el Concello prevé crear en ese lugar.

Otro de los lugares afectados es el relleno de A Pasaxe donde se hallaban la Conservera Celta y la antigua fábrica de jabones La Toja. En 2007 Demarcación de Costas abrió la posibilidad de reducir la edificabilidad al probar un nuevo deslinde del dominio público marítimo-terrestre, ya que 41.000 metros cuadrados de superficie pasaron a ser propiedad del Estado.