El Juzgado de lo Contencioso-administrativo número 4 ha desestimado el recurso interpuesto por la Compañía de Tranvías contra los acuerdos de la Junta de Gobierno Local en los que se le imponía la bajada de las tarifas del bus que entraron en vigor en febrero de 2019, con Marea Atlántica en la Alcaldía. Contra esta decisión cabe presentar recurso de apelación en el plazo de quince días. La Compañía de Tranvías, preguntada por este diario, ha asegurado que “está analizando la sentencia en profundidad” antes de comunicar cuáles serán sus próximos pasos.

La concesionaria del servicio del bus urbano en la ciudad alegaba en su recurso que la bajada del precio —de 1,30 euros a 1,20 euros en el billete general—, así como otras modificaciones en las tarifas como que los menores de trece años viajasen gratis, se redujesen los precios del bonobús diez céntimos y las tarifas sociales y universitarias, así como que todos los transbordos fuesen gratuitos en un plazo de 45 minutos, infringía el convenio de adjudicación de la concesión, porque se cambiaban sus acuerdos “unilateralmente”.

La jueza, sin embargo, considera en su resolución que no se modifica el contrato sino que se “adecúa al derecho comunitario, que está en un escalón superior al derecho interno” y argumenta que este cambio está recogido en el artículo 74 de la Ley de Contratos del Estado, que señala que “la Administración podrá modificar, por razón de interés público, las características del servicio contratado y las tarifas que han de ser abonadas por los usuarios”.

La magistrada indica, además, que la revisión de tarifas se realiza según la fórmula polinómica que se indica en el artículo 20 del Reglamento del Funcionamiento del Servicio de Transporte Colectivo de Viajeros mediante Autobuses de la ciudad de A Coruña, y este último precepto prevé un beneficio de un 15%, “muy inferior” al beneficio declarado por la propia compañía. “Este dato ya es relevante para una revisión extraordinaria de las tarifas, tal y como señala la defensa del Ayuntamiento”, consta en el fallo de la magistrada. Y es que, hasta febrero de 2019, el precio de las tarifas del bus se había revisado siempre al alza, en aplicación de la fórmula polinómica que está recogida en el convenio entre la concesionaria y el Concello. En esta fórmula se tienen en cuenta factores como el precio del combustible y los salarios del personal de Tranvías, así como el IPC, entre otros. Fue Marea Atlántica quien decidió rebajar el precio del bus e introducir otras mejoras unilateralmente, al no haber llegado a un acuerdo con la concesionaria del servicio público que, lejos de querer reducir las tarifas, proponía, entonces, que el billete general subiese a 1,39 euros.

“En el presente caso se ha detectado un beneficio industrial de la compañía extraordinario o excepcional por excesivo, y teniendo en cuenta la duración del convenio, treinta y ocho años, entra dentro de lo razonable y proporcionado que el Ayuntamiento pueda revisar las tarifas cuando estas durante tantos años han venido revisándose siempre al alza y siendo desproporcionado el equilibrio entre el beneficio de la compañía y el interés público de los ciudadanos”, consta en la sentencia, que avala las tesis del Ejecutivo de Marea Atlántica y rechaza los argumentos de la Compañía de Tranvías. “Esto también determina que no proceda compensación económica alguna, pues el beneficio de la Compañía de Tranvías pasa de ser extraordinario a razonable”, subraya la magistrada en la argumentación de su decisión.

“Esto demuestra que el Gobierno de Xulio Ferreiro tenía razón en sus argumentos, a pesar de las dudas expresadas por Inés Rey y su equipo. Llevamos dos años en blanco en cuanto a medidas de fomento del transporte público y toca ponerse a trabajar. Ya no hay excusas para no cumplir el acuerdo de investidura y profundizar en la bajada de tarifas, con descuentos a mayores de 65 y menores de 25 años”, declaró ayer la viceportavoz de Marea Atlántica, María García, tras la recepción de la sentencia.

Y es que, si bien la alcaldesa, Inés Rey, dijo ayer que la sentencia era “positiva para los intereses municipales”, se mostró también “cautelosa” con su contenido, ya que no es firme. A pesar de que en el acuerdo con Marea Atlántica para el inicio del mandato, el PSOE se comprometió a introducir bonificaciones en el precio del bus, sin cargo para las arcas municipales, la alcaldesa sigue defendiendo que ha de hacerse en consenso con Tranvías.

En el balance de sus primeros cien días en el Gobierno y preguntada por este diario, sobre futuras rebajas en el precio del bus, Rey había contestado: “Lo que no va a hacer este Gobierno es tomar decisiones unilaterales con fines... los que sean y que le puedan costar a las arcas municipales dinero”, toda vez que Tranvías había solicitado a la Xunta que aprobase una revisión de los precios al alza, para que el billete sencillo costase 1,39 euros. y había dicho, además, que “probablemente”, la decisión de Marea Atlántica le costaría “mucho dinero” a las arcas municipales.

La magistrada del Juzgado de lo Contencioso-administrativo número 4 destaca en su sentencia, sin embargo, que la modificación de los precios del bus se realizó mediante un “procedimiento complejo, con tres informes internos, dos externos y una consulta a la Comisión Nacional de los Mercados y de la Compensación”; que fue dictada por el órgano competente y siguiendo el procedimiento legalmente establecido. y que, a diferencia de lo que alegaba Tranvías, no era necesaria la aprobación de una nueva ordenanza municipal para aplicar la rebaja de los precios, ya que las tarifas estaban ya en vigor.

“No se establece una nueva tarifa, como no se establecía en la revisión que se venía realizando anualmente, sino que, partiendo de los datos existentes, se ha ajustado a unos beneficios razonables de la concesionaria para adaptarla a las exigencias del derecho comunitario”, manifiesta la jueza en su sentencia.

El Gobierno local, “cauteloso”

La alcaldesa, Inés Rey, dijo ayer que, a pesar de que la sentencia es favorable a los intereses municipales es necesario ser “cautelosos”, porque no es firme. “Siempre defendí estudiar las posibles bajadas de las tarifas para mejorar el transporte público, eso sí, desde el diálogo con la concesionaria, puesto que hacerlo de forma unilateral puede llegar a paralizar nuevas mejoras en el servicio y genera incertidumbre para las arcas municipales”, apuntó ayer, a pesar de que la desestimación del recurso de Tranvías avala la actuación del Ejecutivo de Marea Atlántica para introducir mejoras en las tarifas sin necesidad de acuerdo.

Marea urge más mejoras

Marea celebró ayer el fallo, ya que da la razón a su acción de Gobierno. La portavoz de la formación, María García, instó ayer al Gobierno local a que cumpla el acuerdo de investidura y proceda a “la implantación inmediata de las nuevas tarifas con descuentos para mayores de 65 años y menores de 25”, tal y como acordaron al inicio del mandato. El exconcejal de Mobilidade Sostible, Daniel Díaz Grandío, responsable de la rebaja de tarifas, señaló ayer que el fallo “pone de manifiesto que las condiciones económicas del contrato de transporte público son muy perjudiciales para el Ayuntamiento” y para los vecinos. “Aunque otros gobiernos escogieran callar”, apostilló.

El PP, a la espera de que sea firme

El PP dijo ayer que respeta “todas las decisiones judiciales” y que “hay que ser prudentes” ya que la sentencia no es firme.

El BNG insta a cambiar las líneas

La concejal del BNG Avia Veira celebró ayer el fallo y tildó de “leoninas” las condiciones de la concesión. Instó al Gobierno local a introducir los cambios acordados para el inicio del mandato, como la ampliación de horarios, reestructuración de líneas, mejora de frecuencias y estudio de los modos de gestión.

Faraldo, con el servicio público

La concejal no adscrita y militante de Podemos, Isabel Faraldo, se alegró ayer del fallo. “Entendemos el servicio de Tranvías como un servicio público en el que debe primar el interés colectivo”, dijo.