La Junta de Gobierno Local ha concedido licencia al Grupo Empresas Marte para reconstruir y ampliar los edificios de los números 98, 100 y 102 de la avenida Fernández Latorre, en Cuatro Caminos, después de que la empresa cambiase su proyecto de reforma y lo adaptase a la normativa vigente.

Hasta esta ocasión, el Concello había denegado siempre sus solicitudes de permiso porque la Dirección Xeral de Patrimonio entendía que el proyecto que la empresa había presentado rompía la configuración de las fachadas de los edificios originales, así como que sus galerías y balcones excedían el volumen de las construcciones originales, algo que no se adapta a la actual normativa.

El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia rechazó el año pasado el recurso que había presentado la empresa para reconstruir los inmuebles según su proyecto presentado 2012, para impugnar el fallo del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo, que tampoco avalaba la legalidad de las obras que pretendía realizar en estos tres inmuebles, que se han convertido en una de las estampas de la zona de Cuatro Caminos, por su deterioro constante.

Tras estos reveses judiciales —y que Patrimonio rechazase hasta en cuatro ocasiones en los últimos cinco años que se le concediese licencia para ejecutar la reconstrucción— la promotora decidió cambiar, finalmente, el proyecto, adaptarlo a la normativa y, de este modo, ha conseguido el visto bueno de la Junta de Gobierno Local para poder rehabilitar los inmuebles.

El permiso de actuación en estos tres inmuebles se concede para la construcción de 17 viviendas, en seis alturas, locales y garajes, en tres sótanos, más planta baja. El plazo de ejecución de las obras es de 36 meses y el presupuesto asciende a más de dos millones de euros.

En 2018, la licencia que pidió la promotora preveía la construcción de 19 viviendas, también en seis alturas, con locales y garajes en tres plantas subterráneas y con una planta baja. Sus pretensiones se han rebajado con el paso de los años y con la adaptación del proyecto a las exigencias de Patrimonio.

Las tres parcelas se correspondían, según consta en la documentación de la licencia, con tres edificios totalmente independientes, que databan de los años 1900, 1860 y 1900. A pesar de que los inmuebles 98 y 102 fueron parcialmente derribados años atrás, Patrimonio defendió siempre que las fachadas con galerías de madera que tenían los edificios originales tendrían que ser reproducidas cuando se rehabilitasen los inmuebles y en las mismas dimensiones, un extremo que la promotora no introducía nunca en su proyecto, aunque sí lo modificó en varias ocasiones para intentar adaptarlo a la normativa vigente.

Finalmente, la constructora ha modificado sus planes de reconstrucción para mantener las galerías y los balcones en sus proporciones originales y, de ese modo, ha recibido el informe favorable no solo de ola Dirección Xeral de Patrimonio y, por consiguiente, del Concello, que autoriza la ejecución de las obras.