La pandemia redujo un 21% las intervenciones de los bomberos y un 46% los incendios

“Ha sido un año complicado en el que todos nos tuvimos que adaptar a nuevos protocolos y nuevas maneras de trabajar”. Son palabras de Carlos García Touriñán, responsable de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento. Este balance, acompañado de un agradecimiento a los vecinos y un reconocimiento al cuerpo de efectivos, resume la actividad de los bomberos de A Coruña a lo largo de 2020. Un año extraño y atípico en múltiples aspectos en el que la pandemia del coronavirus no solo redujo el número de intervenciones por las limitaciones a la movilidad y el confinamiento domiciliario durante muchas semanas, sino que obligó a modificar la organización del trabajo y la distribución de la plantilla para garantizar la seguridad en un arriesgado escenario de contagios. El año se cerró con 1.504 intervenciones de los bomberos, un 21,7% menos que en 2019, y con una caída significativa de los incendios urbanos, del 45%.

La memoria anual del servicio de extinción de incendios y salvamento recoge su actividad en un año en el que los bomberos “redoblaron sus esfuerzos en las tareas habituales por la división en dos parques y el seguimiento de unos protocolos muy estrictos”, resaltó ayer el concejal de Seguridad, Juan Ignacio Borrego. Hubo un 40% menos de incendios forestales (se atendieron 28), aunque se registró casi un 50% más de incendios pequeños en la vía pública (113, incluidos los de vehículos).

La intervención específica más habitual fue la caída de objetos a la calle, por la que se llamó a los bomberos en 196 ocasiones, seguida de la limpieza de calzada (151) y los incendios urbanos (146). Los efectivos del servicio realizaron 95 rescates a personas por diversas circunstancias, fueron requeridos para abrir una puerta 70 veces y participaron en 43 retenes de seguridad. Las 1.504 actuaciones totales son el número más bajo desde 2017, cuatrocientas menos que el pico alcanzado en 2019, cuando los bomberos llegaron a la cifra más alta de los últimos quince años, 1.921.

Si la efectividad en el trabajo del servicio se mide en celeridad, los bomberos resolvieron el mayor número de intervenciones, 409, entre 15 y 30 minutos; 75 fueron resueltas en menos de un cuarto de hora y en 123 fueron necesarias más de cuatro horas. Borrego apuntó que en el 90% de los siniestros se llegó al lugar en menos de 12 minutos desde que se recibió la llamada y en menos de cinco en el 17% de los casos. Agosto fue el mes con más trabajo (180 actuaciones) y las franjas horarias entre las 10.00 y las 11.00 y las 21.00 y las 22.00 horas, las más activas en incidencias.

Los bomberos estrenan un servicio de información online actualizada cada cinco minutos en el que se puede seguir qué actuaciones cubren en la ciudad.

El fuego destroza el salón de un piso junto a la avenida de Oza

Dos unidades de los bomberos sofocaron un incendio ayer por la mañana en la quinta planta de un edificio de la calle José Luis Cereijo, entre las avenidas de Oza y del Ejército. No hubo heridos, aunque se produjeron serios daños en el salón y el humo afectó al resto del piso. El fuego se declaró en esta habitación por causas desconocidas y de la vivienda afectada salió a la calle un matrimonio mayor, seguido poco después por los vecinos del resto de domicilios, que fueron atendidos por agentes del 091 y el 092. Los bomberos intervinieron durante una media hora tanto dentro del edificio como en la fachada para que las llamas no afectasen a las demás viviendas.