“El sector turístico será uno de los más afectados en los próximos meses, incluso años”. Este pesimista diagnóstico lo daba a este periódico hace poco más de un año, con la población confinada por la primera ola del COVID, el director del Plan Estratégico de Turismo de A Coruña, con vigencia para el periodo 2017-2020. Tras un verano con escasos visitantes, con actividades reducidas, sin fiestas y con establecimientos total o parcialmente cerrados en los meses de otoño y parte del invierno, incluidos algunos hoteles, la ciudad encara una etapa de recuperación incierta que prevé apoyarse en la explotación de A Coruña como “destino seguro”. En el horizonte se adivinan la elaboración de un nuevo plan turístico hasta 2025 y el refuerzo de líneas de actuación ya promovidas en el anterior, según avanza el Gobierno local al grupo municipal del PP en respuestas a preguntas escritas del pleno.

“La estrategia va a consistir en la mejora de la gobernanza, la competitividad, la sostenibilidad y las ayudas al sector”, resume el Concello en la misma respuesta. De acuerdo con esta nueva estrategia, la administración local, a través del Consorcio de Turismo, se propone vender la ciudad como un valor de autenticidad del “carácter atlántico” y con sello de “sostenibilidad”. La creación de paquetes de productos turísticos con servicios y actividades variadas para distintos perfiles de visitantes y la potenciación de A Coruña como lugar ideal para conocer y disfrutar en viajes cortos de entre tres y cinco días —denominados city break— en cualquier época del año son otras líneas de trabajo a las que apunta el Gobierno local.

Más allá de conceptos y objetivos generales, el Gobierno local apunta a la cultura y el deporte como ámbitos con los que atraer turistas mediante iniciativas seguras o de “fuerte impacto económico”, como la celebración de competiciones náuticas. Una nueva ruta con Pablo Picasso como motor artístico, una nueva señalización en un foco de gran valor patrimonial como la Ciudad Vieja y colaboraciones entre el sector público y el privado a través de un calendario conjunto de propuestas son ejemplos que el Ayuntamiento promueve para un sector, el cultural, del que desde septiembre pasado ha decidido encabezar la alcaldesa, Inés Rey.

Otro sector de especial importancia, muy castigado por las restricciones derivadas de la crisis sanitarias durante el último año, es el turismo de reuniones o segmento MICE, acrónimo en inglés de Meetings, Incentives, Conventions, Exhibitions/Events (encuentros, incentivos, convenciones y exposiciones/eventos). El plan estratégico 2017-2020 realzaba la relevancia de este ámbito por sus efectos en otros sectores, como la hostelería y el comercio locales y el Concello pretende volcar de nuevo esfuerzos en su desarrollo. El director del plan de turismo, Iñaki Gaztelumendi, alertaba hace un año en este diario de que el turismo de congresos sería “el último de los sectores vinculados al turismo en recuperarse”. Para responder a esta desventaja, el Gobierno local tiene entre sus aspiraciones la creación de una entidad para captar congresos y la colaboración con la asociación de hoteleros, Hospeco, para impulsar el sector MICE.

El Concello estudia también la implantación de una nueva oficina de turismo, la licitación de un plan estratégico 2021-2025 y la colaboración con la Asociación Galega de Agencias de Viajes para la “paquetización de productos turísticos”. La Universidad es otro lugar al que mira el Gobierno local, ya que plantea la cooperación con la institución académica en “estudios de inteligencia turística” con los que poner en práctica nuevos planes para una nueva etapa, esta vez marcada por una incertidumbre mayor.

Último trámite para el ente para captar congresos

Solo una firma ante notario se interpone en el camino para la constitución de Convention Bureau, una plataforma profesional con participación pública y privada para coordinar la captación de congresos y reforzar la imagen de la ciudad como destino de referencia en el turismo de negocios, según responde el Gobierno local al grupo del PP. La gerente del Consorcio de Turismo, Lanzada Calatayud, avanzó el mes pasado que los estatutos del ente, que figuraba en el plan estratégico de turismo hasta 2020, ya están redactados y que en abril se preveía “empezar a trabajar”.

El reto de la transformación digital

El diseño de una aplicación para teléfonos móviles que explique a los visitantes los puntos de mayor interés que se pueden encontrar en la ciudad es uno de los proyectos a los que apuntaba el Gobierno local desde el comienzo del mandato. El Consorcio de Turismo trabaja en ello con el estudio de “varias herramientas”, tras haber trabajado durante la pandemia con un canal de información y atención turística a través de WhatsApp y con la plataforma Zoom. El “avance en la transformación digital” es otro de los campos en los que el Concello quiere sobresalir, para lo cual mantendrá acciones de colaboración con la Universidade da Coruña para analizar las mejores soluciones tecnológicas.