Un espacio dotado de equipamientos profesionales y asesoramiento personalizado para fabricar mobiliario, realizar el mantenimiento de una bicicleta, acudir a charlas o compartir conocimiento. Esa es la idea del coruñés Miguel Pampín, afincado en Suiza. Ha creado la cooperativa O Taller, y ahora busca socios para que se convierta en realidad. “Llevo desde 2012 fuera de casa y ya pesa un poco. Mi idea es volver. Quiero poner a funcionar O Taller de aquí a un año. Estamos en una fase de encuesta para conocer dónde tendría mayor aceptación y estamos valorando A Coruña, Santiago y Vigo”, desvela.

Las reflexiones diarias de Pampín le llevaron a dar forma a esta idea. “Me di cuenta de que vivimos en un mundo cada más virtual y estamos un poco desconectados de la realidad. La gente necesita hacer cosas con sus manos. Además, es un mundo individualista, competitivo y de consumo. Hace falta reforzar los valores de compartir y cooperar. Estas dos circunstancias hacen que surja la pregunta de ¿por qué no crear un espacio compartido en el que hacer cosas?”, expone.

Este emprendedor de 40 años, con estudios en Ingeniería de Caminos, está cansado de sentarse frente a una pantalla. Necesita más. “O Taller se podría imaginar como un espacio con diferentes apartados. Una zona de carpintería y bricolaje, otra para conferencias y charlas sobre temáticas de responsabilidad social y medioambiental. Un espacio de esparcimiento y un almacén”, detalla Miguel Pampín, en cuya hoja de ruta hay un apartado especial para los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) que fija la ONU, como son la reducción de las desigualdades, las ciudades sostenibles, la energía no contaminante o las acciones por el clima.

Así, desde esta cooperativa, se favorecería el intercambio de conocimiento, la economía circular y los proyectos eco responsables. “Que sea un punto de encuentro de gente con las mismas inquietudes sobre el medioambiente, la creación, el reciclaje y la economía social”, añade.

Un tipo de iniciativa que se suele ver en las principales ciudades europeas, pero que todavía no se ha asentado en Galicia. “También se podrían recoger residuos de la construcción, como madera y metales, para fabricar cosas. La gente se encontraría con un espacio donde realizar sus proyectos, con asesoramiento con gente especializada”, explica el coruñés, que cuenta con el asesoramiento de técnicos de Rede Eusumo impulsada por la Xunta de Galicia para el fomento y el desarrollo de la economía social. La filosofía de O Taller es muy similar “a la de un coworking, pero más orientado a temas de construir y hacer cosas con las manos”. “Nos hará falta la implicación de entidades sociales”, concluye.