El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) dio ayer un nuevo paso en el largo proceso para la construcción de la estación intermodal al aprobar el convenio que deberá firmar con el Concello y la Xunta para poner en marcha esa infraestructura. A pesar del carácter decisivo de ese trámite, aún pasarán meses para que las obras se inicien, puesto que Adif prevé disponer en noviembre del proyecto de la reforma de la terminal ferroviaria tras su adaptación al nuevo Código Técnico de la Edificación y luego tendrá que licitar los trabajos.

La Xunta espera a la firma del convenio para poder licitar la construcción de la nueva estación de autobuses que se levantará adosada a la del ferrocarril, así como a que Adif defina en su proyecto cuáles son las zonas comunes entre las dos terminales con el fin de impedir que los trabajos de ambas se interfieran, lo hará que también tenga que esperar a la terminación en noviembre del documento que ahora revisa Adif. El Concello debe terminar por su parte la tramitación de la modificación del plan general en esta zona de la ciudad para comenzar las obras de los accesos al complejo y la urbanización del entorno.

Al anunciar ayer el visto bueno al acuerdo, Adif también mencionó que licitará “de forma inmediata” la redacción del proyecto de la pasarela peatonal y ciclista que conectará las avenidas de A Sardiñeira y O Ferrocarril. El organismo publicó a principios de mes en el Diario Oficial de la Unión Europea un anuncio previo a la licitación en el que indicaba que ese trabajo debe ser entregado en el plazo de 16 meses a partir de su adjudicación, que previsiblemente se producirá cuando ya estén en marcha las obras de la estación.

Los Presupuestos Generales del Estado de este año cuentan con una partida de 18 millones para iniciar la construcción de la intermodal, pero Adif adjudicó el 31 de marzo el estudio para reformar el proyecto con el fin de que esté terminado en noviembre. Esa previsión hará que las obras no puedan comenzar antes de mediados de 2022 como mínimo y que su conclusión se extienda hasta 2024, ya que su duración está establecida en 24 meses.

El convenio que suscribirán las tres administraciones sustituirá al firmado en 2009 para esta misma actuación, que preveía la construcción de una estación intermodal con unas dimensiones mucho mayores, ya que incluía un centro comercial Vialia, la cobertura de las vías en la zona de A Sardiñeira y la edificación con fines residenciales en esa misma área. El proyecto, diseñado por el arquitecto César Portela, fue presentado en 2011 pero fue desestimado posteriormente por el Gobierno central del Partido Popular, que ordenó que fuera reducido de forma sustancial.

Esa decisión implicó la eliminación del centro comercial y la cobertura de las vías, así como del proyecto inmobilario. Pero el nuevo convenio reserva para Adif 5.100 metros cuadrados de superficie comercial en la terminal ferroviaria que el organismo podrá vender a entidades privadas, además de otros 7.400 cuyo actividad comercial tendrá que estar relacionada con los servicios que preste la estación y que, al contrario que los anteriores, no podrán ser enajenados.

El convenio fija como obligaciones de Adif la remodelación de la terminal de trenes, en la que invertirá 48,5 millones para reformar el espacio para los viajeros, prolongar la cobertura de los andenes, trasladar las paradas de taxis y buses, construir un vial subterráneo hasta la estación de autobuses e instalar una pasarela peatonal. La Xunta se compromete a financiar con 17,4 millones la nueva terminal de autobuses interurbanos y el Concello pagará el aparcamiento que se construirá bajo ella, que explotará durante 20 años, además de las obras de los accesos rodados al complejo.