La convocatoria para mañana de una manifestación en contra de la venta de los terrenos portuarios que queden liberados —apoyada por Marea Atlántica, BNG y Podemos— llevó ayer a la alcaldesa, Inés Rey, a reclamar “serenidad y voluntad de diálogo” a todos los partidos y administraciones con el fin de “seguir avanzando en la integración del puerto en la ciudad”. La regidora aseguró que defenderá en las negociaciones que mantiene con la administración central y la autonómica sobre el futuro de los muelles su titularidad pública, la creación en ellos de equipamientos y espacios libres públicos y de actividades económicas relacionadas con el mar, aspectos apoyados por el pleno municipal por unanimidad.

Rey eludió mencionar la condonación de la deuda de la Autoridad Portuaria, reclamada por todos los partidos y cuya cuantía fuerza a la institución a plantear la venta de terrenos. Tan solo citó que la próxima reunión entre las tres administraciones se realizará a mediados de junio y que ahora es necesario elaborar un protocolo de reordenación del espacio portuario interior que sustituya a los convenios de 2004 que establecen la venta de los muelles para costear las obras del puerto exterior, origen de la deuda de la Autoridad Portuaria.