El Plan de Reactivación Económica y Social de A Coruña (Presco) que el Concello pondrá en marcha este año estará aprobado este mes según la previsión del Gobierno local, que pretende que las medidas incluidas en esta iniciativa entren en vigor cuanto antes. La comisión de Facenda, en la que se negocia este plan con los grupos municipales, se reunió ayer y volverá a hacerlo pasado mañana y además aborda también la ampliación de los convenios con entidades ciudadanas que reclama la oposición desde hace meses.

Pese a la exigencia del resto de formaciones políticas, el Gobierno local mantiene los seis millones de euros como dotación del nuevo Presco, frente a los 13,2 de la primera edición. Según informó ayer, las ayudas directas para empresas y autónomos tendrán una cuantía única de 2.000 euros y podrán solicitarse con tan solo una declaración responsable para recortar los plazos de su tramitación.

Aunque el Ejecutivo municipal agradeció las aportaciones realizadas por todos los grupos, el del Partido Popular interpretó ayer que se trata de excluirle en la aprobación del Presco porque se rechazan sus propuestas, como la de aumentar a 3.000 euros la dotación de las ayudas directas y la de todo el plan, que estima que puede incrementarse con los dos millones de beneficios de Emalcsa que se incorporarán al presupuesto del Concello gracias al apoyo de los populares en la junta general de la empresa.

El PP reclama además que todas las ayudas sean compatibles entre sí y que se tramiten en un plazo máximo de tres meses, frente a los cuatro que plantea el Gobierno local. Otra de las quejas de esta formación es la negativa municipal a incluir entre los beneficiarios de los convenios a la Federación de Asociaciones de Madres y Padres de Centros Concertados. Los populares exigen que se aumenten las subvenciones a entidades para las que ya se aprobaron ayudas este año y que se concedan otras nuevas mediante una inyección de 500.000 euros a este programa.

Marea Atlántica defiende por su parte aumentar la dotación de las ayudas para la contratación de personal, que ahora recibirían 150.000 euros y proporcionarían mil euros por cada contratado, pero sin garantías salariales ni duración del contrato. Este grupo propone que la ayuda sea de 6.000 euros, que el contrato dure seis meses y que el salario mínimo sea de mil euros. También plantea que en las ayudas se adelante el 98% de la cuantía y que se incrementen las destinadas al sector cultural, que se redujeron a la mitad sobre las del año pasado.

El BNG calificó de “insuficientes” los avances logrados en la negociación y reiteró su propuesta de que se suscriba un crédito para contar con más fondos para el Presco, ya que los técnicos municipales explicaron en la comisión que los beneficios de Emalcsa son inferiores a las previsiones que había fijado el presupuesto de 2020, prorrogado para este ejercicio.