Las viviendas del antiguo núcleo rural de San José, situadas al borde la avenida de Fisterra y a corta distancia de la refinería, serán derribadas de forma inminente, según informó el Gobierno local, ya que se encuentran valladas para el inicio de los trabajos. El Concello expropió estas casas con el fin de poder demolerlas y urbanizar el lugar, a cuyas ruinas se trasladó el tráfico de drogas que se llevaba a cabo en el asentamiento de Penamoa hasta que desapareció con la construcción de la tercera ronda.

A pesar de las operaciones policiales desarrolladas en la zona en los últimos tiempos, la venta de estupefacientes continúa en una de las viviendas. En 2018, una intervención del Cuerpo Nacional de Policía en la que participaron numerosos agentes se saldó con la detención de siete personas, todas ellas pertenecientes a la misma familia y entre las que se encontraban dos menores de edad. A pesar del despliegue efectuado, tan solo fue posible la incautación de 20 gramos de heroína y otros 20 de cocaína, además de dos escopetas de balines y una réplica. En las viviendas fueron encontradas jeringuillas entre los muebles y los colchones rotos que se hallaban en las ruinas.

Una vez que se derriben las construcciones existentes, se procederá a urbanizar los terrenos y a ensanchar la calzada, que en ese punto es más estrecha que en el resto de la avenida a causa de la presencia de esas edificaciones. ruinosas.

La operación programada en San José supondrá además la incorporación al patrimonio municipal de una parcela de 486 metros cuadrados que ahora pertenece a la Xunta y en la que en el pasado existió una caseta de peones camineros de la que ahora solo quedan los restos, ya que la finca está ocupada en la actualidad por vegetación.

La administración autonómica elaboró un informe en el que determinó que ese terreno, parte del cual ocupa un tramo de la calzada de la avenida de Fisterra, es innecesario para los servicios públicos que presta, por lo que propuso cedérselo de forma gratuita al Concello. La finca linda en su parte trasera con las instalaciones de la refinería de Repsol Petróleo.

Para que pueda efectuarse la transferencia de la parcela, es necesario que la institución municipal lo solicite formalmente, trámite que será aprobado hoy por la Junta de Gobierno Local, tras los informes favorables a esta iniciativa elaborados por los departamentos de Planeamiento y Gestión del Suelo, así como de Patrimonio Urbanístico.