Uno de los dos inmuebles residenciales que la empresa vasca Lipromo prevé construir en la zona de A Maestranza se levantará sobre restos arqueológicos del antiguo sistema defensivo de la ciudad. Estos vestigios ocupan una parte de la parcela de 2.133 metros cuadrados (12.155 metros cuadrados edificables) ubicada en la esquina de la calle Metrosidero y la avenida de Metrosidero. El otro terreno en el que construirá, de 1.353 metros cuadrados y pegado a un edificio de la calle Campo da Estrada, no presenta ningún vestigio de la muralla del casco histórico.

El plan de A Maestranza sitúa uno de los edificios sobre parte de los restos de la antigua muralla

De acuerdo con el estudio de detalle que la promotora envió al Ayuntamiento y que el Gobierno local ha aprobado esta semana, la empresa propone en la finca con restos defensivos una división en dos bloques separados entre sí por un patio de parcela abierto a la fachada en el cruce de las dos calles. La empresa aprovecharía uno de los volúmenes, previsiblemente menos afectado por los vestigios arqueológicos, mientras que en el otro, donde los informes del Concello muestran una mayor concentración de restos, renunciaría a edificar, por lo que la administración local dispondría de espacio libre. A cambio, compensaría a Lipromo con suelo en otra zona de la ciudad por la edificabilidad que perdería en A Maestranza, aspecto sobre el que las dos partes negocian en la actualidad.

En esa parcela de mayor tamaño la constructora, según el estudio de detalle, levantaría en paralelo a la avenida de Metrosidero un edificio de alrededor de medio centenar de viviendas con planta baja y cinco alturas, al igual que en la otra finca del ámbito para la que solicitó licencia, la que no tiene restos de la muralla. El plan especial de Maestranza, del año 1994, recoge estas indicaciones.

Lipromo pidió sendos permisos para construir en A Maestranza a finales de 2019, poco después de que nadie pujase en la subasta pública por las dos parcelas que eran propiedad del Ministerio de Defensa. Desde entonces el Concello tramita sus licencias. Según fuentes municipales, al expediente se ha incorporado otro de consulta a la comisión del Plan Especial de Protección y Reforma Interior (Pepri) de la Ciudad Vieja y Pescadería, al que ha trasladado los primeros tanteos estéticos. A la licencia original se le añadirán los planos corregidos basados en el estudio detalle aprobado esta semana por el Gobierno local. Este documento tendrá que recibir la luz verde del pleno de la Corporación antes de la que concesión de la licencia.

Marea Atlántica y el BNG se oponen a la construcción de pisos en la zona de A Maestranza, al igual que el colectivo Comisión Aberta en Defensa do Común, y reclaman que los terrenos pasen al patrimonio público. Cuando gobernaba, Marea puso en marcha una modificación del plan de Maestranza para rebajar la edificabilidad prevista en la zona por la presencia de restos de la antigua muralla, lo que implicó la suspensión de licencias en el ámbito durante un año. El plazo, que no podía ser prorrogado, concluyó en octubre de 2020 sin que la tramitación del cambio urbanístico estuviera terminada, que ahora pretende culminar el Gobierno socialista.