En plena cuenta atrás para la noche de San Juan en A Coruña, las placeras esperan que este miércoles sea el día grande de venta de la sardina, tan típica de estas fechas. “La gente siempre espera a última hora”, cuenta Eugenia, desde su puesto en la plaza de Lugo.

Las hay grandes y pequeñas y los precios oscilan entre los siete y los diez euros. “Aunque todo puede cambiar”, advierten. Dependerán de la cantidad que llegue este miércoles a la Lonja, pero suponen que la horquilla de precios será similar a la de los últimos días. “El sábado las tuvimos a diez y hoy —por ayer— a siete”, informan desde Pescados Teri Ceán, donde han registrado “bastantes encargos” para esta noche mágica en A Coruña. Ya esta mañana, sus bandejas de sardinas quedaron vacías, solo con hielo, lo que parece una buena señal. “Veremos a ver qué pasa”, añade, sin confiarse.

Eugenia, en cambio, apenas tiene pedidos. “Está siendo un año muy diferente. Hasta el pasado, después del confinamiento, tuve más encargos que ahora”, confiesa la placera, que espera que todo cambie a pocas horas de la fiesta coruñesa. “Se suele vender mejor justo el día antes de San Juan”, apunta, ya que esta noche es la celebración.

El Concello ha tramitado más de 400 autorizaciones para hacer tanto sardiñadas como churrascadas en las calles de la ciudad, aunque solo se podrán hacer en los lugares permitidos. Será obligatorio limpiar los sitios en los que se instalen las parrillas y barbacoas. Los comensales deberán estar distribuidos en grupos de seis personas como máximo en interior y de quince en terrazas. Además, un dispositivo coordinado entre la Policía Local y Bomberos, junto a la Policía Nacional, velará por la seguridad en los barrios.

Marina, que también vende en el mercado de la plaza de Lugo, reconoce que ha habido “pocas ventas”, pero tiene experiencia y sabe que “mucha gente se acuerda el mismo día de que quiere sardinas”.