Rober H. L. Cagiao presentó en 2019 su novela El guardián de las flores, centrada en la ficticia comisaria Paola Gómez y su grupo coruñés de investigadores. Ya ha publicado otros cinco volúmenes de esta saga de novelas negras, y el último, La Virgen de la Peregrina, lo presenta hoy a las 19.00 en FNAC.

En las novelas tienen un gran papel las leyendas gallegas.

Cuando se une el grupo policial aparece un antagonista que asesina con una leyenda de fondo. Y, en los siguientes volúmenes, meto leyendas en todos. En este último se roba al principio de la novela la Virgen de la Peregrina, que tiene su leyenda propia, y también van a Combarro o la isla de Tambo, que fue penitenciaría y leprosería.

¿Por qué las incluye?

Yo soy de Bañobre, en Miño, y eso es un mar de leyendas. En la parte de las Fragas do Eume se decía que había túneles que comunicaban Caaveiro o Andrade, los mouros... Mi bisabuela vivió hasta los 98 años y contaba sus historias, mi abuelo igual, te va calando. Son leyendas orales, y al escribir quería trasladarlas para que no se perdieran y llegaran a más gente, incluso de fuera de Galicia.

¿Por qué novelas de misterio?

Hace poco me preguntaban, ¿pero nunca vas a hacer una novela romántica? ¡Pues no, no lo creo! (ríe) En la novela de misterio puedes meter de todo. El grupo policial tiene sus aventuras amorosas, sus amistades. Puedes meter episodios de miedo, y denuncia social, pues, dentro de lo que cabe, me gusta educar en valores. En realidad, puedes incluir prácticamente todos los géneros en el thriller. Es lo que más me inspira y me divierto muchísimo escribiendo.

Y también lo hace muy rápido.

Ahora estamos con la sexta novela, pero la saga, que son nueve libros, está acabada, aunque el proceso de edición es más largo. Con la pandemia no teníamos actividades presenciales, con lo que también tenía más tiempo. Ahora, con firmas, ferias, ya no es lo mismo.

Vende mucho en Amazon. ¿Escribe diferente para formato digital?

No, qué va. En el primer libro no tenía ni idea de este mundo. Luego la editorial te echa una mano, otros escritores te ayudan, y vas aprendiendo poco a poco. Me llevé una sorpresa, el libro empezó a gustar. El guardián de las flores recibió el premio de la editorial Círculo Rojo y fue el más vendido en Amazon. Aún sigue entre los cien primeros de literatura policíaca, tras año y medio.

¿Qué inspiraciones tiene?

Antes leía literatura diferente a género negro: Juan Marsé, García Márquez, Vargas Llosa... Últimamente leo mucho de policiaca, y me di cuenta del nivelazo que hay en España.

¿Cómo ha estudiado el apartado procedural de las investigaciones?

Mi máxima es, donde no sepas no te metas. Yo viví en un cuartel de la Guardia Civil, con mi padre. La gente me dice que el grupo policial de mis novelas es distinto. Reflejo valores como la lealtad y la amistad, que viví, más allá de lo negro y oscuro del género.

En referencia a la oscuridad, ¿para qué tipo de público escribe?

No me gusta meter mucha sangre, así que diría de 13 años en adelante. Esta semana se me acercó una lectora que debía tener 18 años o menos, y una señora de 85.