El entorno del monte de San Pedro, hasta el parque de Bens y O Portiño, es hogar de unas pocas familias de zorros que en ocasiones, cuando salen de sus guaridas apartadas de los humanos (generalmente de noche o a última hora de la tarde), se dejan ver en zonas próximas al tránsito peatonal. Un vecino de Os Rosales que paseaba por el monte vio hace unos días un grupo de cuatro zorros que parecía estar jugando en una zona de vegetación, a unos 200 metros de caminos peatonales. Las imágenes parecen captar una pelea cariñosa entre tres crías y un zorro adulto.

Es habitual ver a estos animales en los alrededores del barrio de Os Rosales, con frecuencia cerca de contenedores de basura donde buscan comida. Por naturaleza son asustadizos y en cuanto detectan la presencia humana se quedan quietos o escapan del lugar a zonas para ellos más seguras.