Con ayuda de una grúa, los operarios instalaron en la jornada de ayer el esqueleto del ascensor de Os Castros, que permitirá a los vecinos salvar la elevada pendiente de la avenida de A Concordia. Los trabajos en esta zona arrancaron el pasado marzo, pero no fue hasta ayer cuando se pudo ver cómo quedará la estructura del elevador, que conectará las calles Vila de Padrón y Ortigueira con avenida de A Pasaxe. Las obras, que se fueron completando con ayuda de dos grúas, crearon gran expectación en el barrio. La actuación cuenta con un presupuesto de 402.000 euros y el plazo de ejecución es de seis meses, por lo que debería estar acabado y listo para usar en septiembre.