El buen tiempo en A Coruña animó ayer a los bañistas a bajar a los arenales de la ciudad y eso, unido a que estos días hay mareas vivas, es decir, que las mareas suben y bajan más de lo normal, derivó en que la imagen de las playas ayer fuese de aglomeración, en plena desescalada de la pandemia de coronavirus.

Los arenales, pocos minutos antes de las seis de la tarde, cuando llegó la pleamar a su punto más alto, lucían llenos de bañistas y de personas aprovechando el día de calor, de los pocos que regaló este verano.

El Concello retiró a principios de este mes las vallas amarillas que evitaban las aglomeraciones en la playa y a las que obligaba la Xunta, para que no se produjesen en los arenales actividades como botellones o reuniones masivas. El Concello las eliminó al entender que eran innecesarias, ya que en la ciudad no se estaban produciendo estas actividades ni estas aglomeraciones de personas. Los arenales de la ciudad carecen de medidas de control de aforo, ya que, según relatan fuentes municipales, cuando se inició la campaña, el 15 de junio, no había limitaciones para acudir al arenal, es por ese motivo por lo que los semáforos que se habilitaron el año pasado no se pusieron en funcionamiento este verano.

Fuentes municipales indican que siguen funcionando las pantallas de los arenales, en las que se proyectan mensajes de advertencia y las restricciones sanitarias, vigentes, como respetar la distancia entre grupos, o el uso de la mascarilla. En caso de que sea necesario por las mareas vivas, los socorristas desalojan las playas o una parte para evitar que se produzcan incidentes.

La previsión meteorológica para este martes augura otro día de cielos despejados y calor en A Coruña y en toda Galicia. En la ciudad coruñesa Meteogalicia prevé temperaturas que oscilarán entre los 19 grados de mínima y hasta 26 de máxima, por lo que se espera otro día de importante afluencia en los arenales coruñeses.